A tres años del crimen de Fernando Báez Sosa, la Justicia decidió sentenciar a Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Ciro y Luciano Pertossi a prisión perpetua. Lo mismo ocurrió este jueves con la Justicia de La Pampa quien sentenció a la máxima condena a Magdalena Espósito Valenti y Abigail Páez por el crimen de Lucio Dupuy. Sin embargo, una de las grandes cuestiones es cuál es la duración de la máxima condena.
Una de las grandes cuestiones que ha surgido en estas semanas es cuánto es la prisión perpetua en la Argentina, puesto que a diferencia de otros país, la máxima condena no es para toda la vida.
“Nuestro reclamo de Justicia ante lo que no dudamos en llamar el suplicio de Fernando, la responsabilidad de quienes fueron sus ocho asesinos, se resume fundamentalmente en dos momentos de salvajismo y de horror”, manifestó Burlando semanas atrás cuando hizo el primer pedido contra los rugbiers.
“Estamos relativamente conformes, pero queremos ver los fundamentos del supuesto rechazo del planteo de la querella. Lo importante es que Lucio descansará en paz”, aseguró el abogado de los Dupuy ante la prensa después de conocer el veredicto.
En el caso de Lucio, las dos mujeres que estaban a su cuidado fueron encontradas culpables por delitos de “homicidio agravado por el vínculo, por la participación de dos o más personas y por ser la víctima un menor de edad”, sumado a que Pérez fue encontrada culpable del delito de abuso sexual agravado por acceso carnal, mientras que la progenitora fue absuelta.
En ese sentido, para el caso de Báez Sosa, uno de los más complicados es Máximo Thomsen quien fue señalado como uno de los que más agredió y el que golpeó en el piso a Báez Sosa. En ese marco, los otros siete acusados, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli junto con Luciano, Lucas y Ciro Pertossi, podrían recibir también la pena de prisión perpetua.
Tanto la fiscalía, a cargo de Juan Manuel Dávila y Gustavo García, como la defensa de la familia Báez Sosa, a cargo de Burlando, los ocho rugbiers imputados son “coautores” del “homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas” que tiene una pena de prisión perpetua.
Qué es la prisión perpetua y cuántos son años representan en el código penal argentino
En la Argentina, no existe el concepto de cadena perpetua como tal, sino que tiene un máximo de años en los que se puede condenar a un acusado. Si bien en un inicio, en el Código Penal se había determinado que era por tiempo indeterminado, lo cierto es que tras la reforma constitucional de 1994, ese concepto fue eliminado y se puso un límite de años.
Según señala el Código Penal en el artículo 13, la condena a reclusión o prisión perpetua tiene un máximo de 35 años de condena. Aunque también advierte que no es en sí una perpetuidad, ya que el condenado podría salir en libertad condicional.
Este tipo de penas se aplican con delitos como homicidio agravado, abuso sexual que resultara en la muerte de la victima, desaparición forzada de personas agravas, torturas que terminaran en muerte y traición a la patria.
Qué dice el Artículo 13 del Código Penal
ARTICULO 13.- El condenado a reclusión o prisión perpetua que hubiere cumplido treinta y cinco (35) años de condena, el condenado a reclusión o a prisión por más de tres (3) años que hubiere cumplido los dos tercios, y el condenado a reclusión o prisión, por tres (3) años o menos, que hubiere cumplido un (1) año de reclusión u ocho (8) meses de prisión, observando con regularidad los reglamentos carcelarios, podrán obtener la libertad por resolución judicial, previo informe de la dirección del establecimiento e informe de peritos que pronostique en forma individualizada y favorable su reinserción social, bajo las siguientes condiciones:
1º.- Residir en el lugar que determine el auto de soltura;
2º.- Observar las reglas de inspección que fije el mismo auto, especialmente la obligación de abstenerse de consumir bebidas alcohólicas o utilizar sustancias estupefacientes;
3º.- Adoptar en el plazo que el auto determine, oficio, arte, industria o profesión, si no tuviere medios propios de subsistencia;
4º.- No cometer nuevos delitos;
5º.- Someterse al cuidado de un patronato, indicado por las autoridades competentes;
6º.- Someterse a tratamiento médico, psiquiátrico o psicológico, que acrediten su necesidad y eficacia de acuerdo al consejo de peritos.
Estas condiciones, a las que el juez podrá añadir cualquiera de las reglas de conducta contempladas en el artículo 27 bis, regirán hasta el vencimiento de los términos de las penas temporales y hasta diez (10) años más en las perpetuas, a contar desde el día del otorgamiento de la libertad condicional.
Cuál es la diferencia entre prisión y reclusión
También hay una diferencia entre prisión y reclusión, ya que no existe el concepto de “cadena perpetua”. La segunda se da en el artículo 52 del Código Penal donde señalan que “se impondrá reclusión por tiempo indeterminado como accesoria de la última condena, cuando la reincidencia fuere múltiple”.
El único caso que supera los 35 años de prisión es el Robledo Puch, conocido como el “Ángel de la Muerte”, por cometer 10 asesinatos, más robos, violación y otra serie de delitos. Puede pedir la libertad condicional desde el año 2000, pero no se la han otorgado.
Las instancias que tiene la defensa de los rugbiers para apelar
Una vez conocida la condena que realice el Tribunal de Dolores, la defensa de los rugbiers podrá apelar el fallo de la justicia en una serie de instancias.
El primer veredicto lo dará un tribunal de primera instancia, una vez que de su sentencia, la defensa de los rugbiers podría presentar una apelación ante la Cámara de Casación. Sin embargo, este caso para llegar a la Corte Suprema deberá tener la presentación de que no se otorgaron las garantías constitucionales contra los acusados.
Es decir, el veredicto final podría llegar al máximo tribunal si la defensa de los rugbiers da a conocer algún tipo de derechos que haya sido vulnerado durante el juicio.