En Iguazú donde llegaron unos 12.000 turistas por día debieron prohibir el ingreso de autos, en Santa Ana se agotaron las localidades y El Moconá atrajo a 3.500 visitantes en el lugar más agreste y natural de Misiones.
También San Ignacio fue una sorpresa, la noche del Jueves Santo con 15.000 personas que colmaron el antiguo patio de las Ruinas Jesuíticas. En Cerro Monje la religiosidad popular atrajo a 17.000 personas, en su mayoría de la zona, que rezan cada año el Vía Crucis.
En San Ignacio se celebró la Misa Popular de las Misiones, a la que asistió el gobernador Hugo Passalacqua, y luego actuaron Los Nocheros. También volvió a funcionar el espectáculo de luz y sonido que se había roto durante una tormenta.
En Turismo de Misiones estiman una ocupación promedio del 80% con picos mayores en Iguazú. Aún no cuentan con las cifras definitivas.
Los brasileños y los paraguayos han vuelto a visitar Misiones, tras la movilidad cambiaria, y el mayor número de turistas proviene de Capital Federal, Buenos Aires y Córdoba. También arriban de provincias cercanas como Chaco, Formosa, Entre Ríos y Corrientes.