Soledad Laciar reveló lo que dijo Mosquera tras el crimen de Blas Correas: “Mataron a un ‘rubito’”

La mamá del joven asesinado por la Policía reveló su charla con el excomisario Cumplido y expuso al exministro de Seguridad.

Soledad Laciar en el juicio por el crimen de su hijo Valentino Blas Correas a manos de la Policía de Córdoba (Ramiro Pereyra/LaVoz).
Soledad Laciar en el juicio por el crimen de su hijo Valentino Blas Correas a manos de la Policía de Córdoba (Ramiro Pereyra/LaVoz).

En la quinta audiencia del juicio por el asesinato de Blas Correas, Soledad Laciar continuó con sus declaraciones. La mamá del adolescente reveló lo que habló, tiempo atrás, con el excomisario Gonzalo Cumplido y expuso la posición que tomó Alfonso Mosquera, exministro de Seguridad, tras el crimen.

Durante su relato, Soledad se detuvo en una conversación que tuvo con el exjefe de Seguridad Capital zona Sur de la ciudad de Córdoba, Gonzalo Cumplido. Como primera revelación, Laciar contó que el exfuncionario quiso ir antes pero Mosquera no se lo había permitido.

Soledad recordó que Cumplido le dijo que apenas asesinaron a Blas, primero se enteraron el entonces jefe de Policía, Gustavo Vélez, y luego el ministro Mosquera. Y que a él le avisaron un tiempo después, por fuera de lo que marca el protocolo. Además, contó que a uno de los comisarios detenidos, Soria, le borraron del celular una conversación que mantuvo con el jefe de Seguridad Capital, Gustavo Piva, la madrugada del crimen.

“Otra cosa muy grave que pasó es que la madrugada en la que mataron a Blas, Mosquera le dijo a Cumplido que preparara las vallas, que iban a tener problemas porque habían matado a un joven de clase media, a un ‘rubito’”, recuperó Cadena 3 de la declaración de Laciar.

Cuarto día caso Blas Correa declaración de la mamá Soledad Laciar en Tribunales 2. (José Gabriel Hernández / La Voz)
Cuarto día caso Blas Correa declaración de la mamá Soledad Laciar en Tribunales 2. (José Gabriel Hernández / La Voz) Foto: José Hernandez

El miedo de la familia Correas

“Siempre dije qué más me pueden hacer, ya me hicieron mucho daño. Pero la verdad es que estoy empezando a tener un poco de miedo”, dijo Soledad y añadió: “Hoy me siento observada, cada vez que pasa un patrullero por mi casa los policías se descogotan para mirar hacia adentro. Yo me siento vulnerable”.

En una extensa descripción sobre los dos años que siguieron al crimen de su hijo detalló que fue descubriendo “lo más perverso de la Policía y de la Justicia”, y denunció que, en Córdoba, no dejaron que Amnistía Internacional colocara carteles pidiendo por Blas.

Finalmente, sentenció: “Pienso seguir con esta lucha hasta el final. Entré a este juicio sin Blas y me voy a ir sin él. Pero ojalá que antes de morirme pueda ver una mejor Policía, que honremos a la institución”.