A pesar de que la educación universitaria pública de Argentina es considerada una de las mejores del mundo, incontables deportistas de todo el país que quieren estudiar y entrenar al mismo tiempo deciden irse al exterior para continuar sus vidas. Es que, según aseguran, en nuestro país es casi imposible hacer ambas cosas en simultáneo y a un gran nivel.
Al trazar una comparativa con lo que ocurre en otros países como Estados Unidos, los atletas señalan que las condiciones son muy diferentes. “En Argentina no recibía aporte de ningún tipo y se me hacía muy difícil poder afrontar todos los gastos de competencia. Acá (EE.UU.) está todo el sistema armado para hacer las dos cosas: tenemos tutores que nos acomodan todos los horarios y las clases para que no se nos superponga nada”, señaló María Paz Milani, una cordobesa de 20 años que representa a la Universidad de Nevada.
“Todo lo que es estudio y entrenamiento está perfectamente pensado para poder rendir al máximo en ambos”, agregó la joven oriunda de Villa Warcalde. Además, la deportista, que se desempeña principalmente en la disciplina salto en largo, contó a Vía Córdoba que en Argentina “no podía conseguir las zapatillas con clavos que se requieren para poder saltar”.
Más adelante, Milani explicó que “otro aspecto que influyó mucho es que los criterios de selección de los equipos en Argentina no estaban muy claros y sentí que se me ninguneaba, era muy frustrante”. Otra deportista cordobesa que decidió continuar su carrera en el país norteamericano es Mariam Buenanueva, quien también dialogó con este medio y expresó: “En Argentina sí podés entrenar y estudiar al mismo tiempo, pero a distintos ritmos”.
“En Córdoba, yo veía que los chicos que empezaban la facultad comenzaban a faltar a los entrenamientos o los abandonaban porque no tenían tiempo. También escuché otros deportistas que sí podían hacer ambas cosas, pero alargando mucho su carrera universitaria”, dijo la joven que vivía en barrio Parque Vélez Sarsfield. “Acá te apoyan más: me pagan la comida, el lugar para vivir, el gimnasio, todo. La posibilidad de combinar el entrenamiento y el estudio es mucho más fácil”, sentenció Buenanueva.