“Hubo un equipo que vino a ganar y otro que vino a hacer tiempo”. Textual de Facundo Pereyra, capitán de Estudiantes, y en alusión a Instituto, que se llevó un 0 a 0 para la revancha en Alta Córdoba que lo pone a un empate del ascenso a Primera.
Pereyra también descargó su fastidio contra el árbitro Luis Lobo Medina, y lo acuso de ser parcial, en un partido en el que abundó la pierna fuerte. Sobre todo por parte del equipo local. “Fue una vergüenza. Cuando lo designaron, sabíamos que todas las chiquitas se las iban a dar a ellos, y así fue”, descargó el volante de Estudiantes.
Algo similar había ocurrido en la semifinal, en la que Instituto dejó afuera a Defensores de Belgrano, y tras el 0 a 0 en el encuentro de ida, el volante Juan Manuel Olivares apuntó al arbitraje.
CAVAGLIATTO Y LA FINAL DE VUELTA
El presidente de Instituto, Juan Manuel Cavagliatto, acompañó a la Gloria en Caseros, y lo sufrió como todo el mundo Albirrojo. “Lo viví muy intensamente, con nervios. Quiero felicitar a los muchachos y al cuerpo técnico por plantarse así, en una final”, destacó el directivo.