Las consecuencias de la toma del Pabellón Argentina de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) por parte de un grupo de estudiantes y que se extendió por más de un mes, no sólo abarcarán el costado penal sino también el civil.
Es que este lunes se conoció que el dueño del bar que funciona en esa dependencia de la UNC, Gustavo Posadas, iniciará una demanda en este último fuero contra los estudiantes y la docente que se encuentran imputados por la Justicia Federal por el delito de usurpación.
"Recién ahora conocemos quiénes son los que participaron de esta toma, antes no se sabía a quién había que pedir explicaciones o demandar, ahora que están identificados por la Justicia, vamos a ir civilmente contra ellos", dijo el comerciante en diálogo con Mitre 810.
De acuerdo con su relato, las pérdidas generadas en su negocio superan el millón de pesos. "Nosotros no vamos a ir contra la Universidad porque consideramos que no es responsable por lo que pasó, son estas personas las causantes de las pérdidas", finalizó.