Por Gabriela Martín.
Nada como un buen desayuno para arrancar el día con toda la energía. Su consumo regular está asociado a mejoras en el rendimiento físico e intelectual y se considera un marcador positivo en la prevención de la obesidad infantil.
Es clave comenzar el día ingiriendo nutrientes que nos ayudarán a mantenernos saludables y con el peso adecuado. Los minerales, las vitaminas, el zinc, el calcio y el hierro permitirán tener un mejor rendimiento intelectual y prevenir enfermedades.
La Licenciada María Laura Romano brinda una serie de recomendaciones para que el desayuno sea completo y no pongas excusas de ningún tipo. Si bien, en la teoría todos saben perfectamente qué hacer; en la práctica no sucede lo mismo.
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Qué hacer si "no te levantas con hambre"
Si te levantás con esta sensación, probablemente estés cenando muy pesado. Lo ideal sería que comiences a comer más liviano para levantarte con hambre y poder realizar un desayuno completo.
Si incluso cenando liviano te levantas muy temprano y a esa hora no tenés hambre podés realizarlo más tarde y hacerlo saludable igual. En lugar de picotear galletitas o facturas en el trabajo, podés llevarte pan integral fresco o tostadas de salvado y tener queso crema para untarlas como si estuvieras en tu casa.
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Qué hacer si "no tenés tiempo"
Si el problema es el tiempo tenemos varias estrategias para poder solucionarlo.
» Podés dejarte preparado de la noche anterior aunque sea una parte de tu desayuno y hacer el resto en el trabajo o en la facultad.
» Si querés arrancar con la fruta y productos lácteos, dejá preparada una ensalada de frutas natural y mezclala con una "crema light" hecha con queso untable, edulcorante y esencia de vainilla. También podés comer una tostada en dos minutos y llevarte la preparación en un frasco o tupper para comer más tarde. Incluso, en ese mismo tupper, agregá un puñado de cereales integrales y tenés un desayuno completo.
Qué hacer si "te aburre desayunar siempre lo mismo"
Hay varias opciones para poder variar el desayuno sin dejar de hacerlo completo
» Combiná las tostadas con queso untable y, en lugar de agregar mermelada siempre, untá con miel, frutas frescas cortaditas y un poco de dulce de leche.
» Armá un bol con un poco de yogurt, frutas y granola
» Prepará unos panqueques súper fáciles para compartir. Licuá un huevo, una banana, un chorrito de leche, media taza de avena, edulcorante y esencia de vainilla. Acompañá con frutas frescas y la "crema light" mencionada anteriormente.
Un buen desayuno debe contener:
» Una porción de lácteos: leche, yogurt, quesos aportan proteínas y calcio.
» Una porción de carbohidratos (idealmente de digestión lenta): brindan mayor saciedad a largo plazo. Pan integral con semillas, cereales integrales, galletitas con avena, salvado, frutos secos o semillas
» Una fruta, siempre que sea posible, fresca y con cáscara, para brindar más saciedad.