Lorena Miño, la policía que estaba prófuga por el crimen de Lucas González, se entregó este lunes pasadas las 14 a la Justicia. Horas antes, había aparecido a través de un video para contar su versión de los hechos y remarcó que no tuvo “nada que ver”.
Miño está acusada por encubrimiento en la causa por el crimen del adolescente de 17 años, que ocurrió en el barrio porteño de Barracas.
Qué declaró en el video la policía acusada
La efectiva de la Policía de la Ciudad, perteneciente a la comisaría 4D de Barracas, comentó en el video que estaba con una camarada por la zona del asesinato cuando recibieron un aviso. “Eran cuatro masculinos armados dándose a la fuga en una Suran azul, por lo cual con mi compañera fuimos sobre Alvarado en ayuda de mis compañeros”, relató.
“Cuando llegamos a Alvarado y Perdriel ya estaba la Suran estacionada. Se le pidió que descienda al chofer del vehículo. Los chicos ya estaban abajo, uno se da a la fuga y los compañeros decían ‘le dispararon a mi amigo, no dijeron que eran policías, eran chorros’”, dijo entre lágrimas.
Miño intentó seguir, acompañada por su abogado Roberto Castillo. Cabe destacar que, pese a lo relatado por la policía, los amigos de Lucas fueron detenidos por 24 horas, acusados de robo.
La correntina está acusada por encubrimiento agravado, privaciones de la libertad agravadas y falsedades ideológicas. Hasta el momento, se desconoce su paradero.
“Lamento muchísimo la pérdida de Lucas pero yo no tuve nada que ver. A partir del 17 de noviembre nada volvió a ser lo mismo. Se siente el odio de la gente por tres personas que hicieron algo mal. No todos son iguales, no todos hacemos lo mismo”, cerró Lorena Miño.