El papa Francisco recibió hoy al presidente venezolano Nicolás Maduro en una reunión privada en El Vaticano, en una visita sorpresa del mandatario sudamericano en medio de la "preocupante situación" por la crisis política que enfrenta su país y para la que el Pontífice pidió un "diálogo constructivo" que permita "aliviar el sufrimiento de la gente".
"De esta forma, el Papa, que tiene en el corazón el bien de todos los venezolanos, deseó continuar ofreciendo su contribución a favor de la institucionalidad del país y de cada paso que contribuya a resolver las cuestiones abiertas y crear mayor confianza entre las partes", agregó la Santa Sede.
El Pontífice invitó al mandatario, en esa línea, a "emprender con coraje el camino del diálogo sincero y constructivo, para aliviar el sufrimiento de la gente, de los pobres en primer lugar, y promover un clima de renovada cohesión social que permita mirar con esperanza al futuro de la nación".