Lo primero que puede llamar la atención es la cantidad de tiempo que lleva con el diagnóstico: Michael J. Fox supo en 1991 que padecia del Mal de Parkinson. Para muchos puede resultar sorprendente, porque se suele creer que es una enfermedad que aparece a edad muy avanzada o que no permite llevar una vida plena. Pero aunque su enfermedad neurodegenerativa modificó por completo su manera de ver la vida, no le impidió seguir adelante con su exitosa carrera.
En una entrevista reciente, el actor estadounidense contó cómo es vivir con los síntomas y recordó el día en que le comunicaron el diagnóstico: "Mi primera reacción fue decirle al médico 'Has cometido un error, no eres consciente de quién soy'. Simplemente pensé: 'Es absurdo que esto me esté sucediendo'. Me asusté y salí corriendo", afirmó.
El Parkinson por el momento no tiene cura y presenta síntomas que avanzan con los años y consisten en incluyen temblores, problemas de equilibrio y rigidez de las extremidades, entre otros. Pueden tratarse con medicación y cirugía, pero no eliminarse por completo.
Cuando recibió la noticia el inolvidable protagonista de Volver al Futuro tenía solo 27 años. Es decir que hoy, a los 57, vivió más años con la enfermedad que sin ella. Eso parece suficiente para demostrar que seguir adelante tras el diagnóstico es perfectamente posible. Sin embargo fue muy difícil para él: congiesa que su reacción más inmediata al enterarse fue recurrir al alcohol.
El actor logró no solo salir adelante con el Parkinson, sino recuperarse del alcoholismo. Pero antes debió pasar por momentos oscuros, como la tensión que la bebida produjo en su matrimonio. Lleva casado con Tracy Pollan desde 1988 y tienen 4 hijos, pero en aquellos años el matrimonio atravesó una situación complicada.
Fox asegura que se niega a permitir que ésta le impida disfrutar del momento presente: "Está bien entender dónde estoy hoy, pero no tengo que pasar mucho tiempo pensando en dónde estaré mañana". Esta es la filosofía que lo ayuda a vivir con s enfermedad. "Hago lo que necesito: hacer ejercicio, tomar mis medicamentos correctamente o descansar lo suficiente", confieza en la entrevista antes mencionada, citada por el diario La Nación.
El actor tiene una fundación destinada a financiar investigaciones sobre el Parkinson y confía en que otras personas que padecen este mal puedan tomar su ejemplo y se permitan a sí mismas vivir plenamente. "Alguien dijo una vez: 'Algún día habrá una cura para la enfermedad y será por ti'. Si eso sucede, será mucho más especial que cualquier película o programa de televisión que pudiese haber protagonizado", remarcó.