El gobierno estadounidense afirmó que no reconocerá al presidente que sea elegido en las próximas elecciones de Venezuela, al considerar que son unos comicios "ilegítimos" y no cumplen los requisitos de ser "libres, justos, creíbles y transparentes".
"Nuestra posición y la posición de la comunidad internacional es muy clara. Estas elecciones serán ilegítimas, los resultados no serán reconocidos", sentenció el jueves un alto funcionario del Departamento de Estado a los periodistas en Washington.
"Y el Gobierno venezolano necesita hacer reformas electorales significativas que permitan unos comicios verdaderamente libres, justos, transparentes y creíbles bajo la observación internacional", agregó.
Este es el tercer pronunciamiento del Departamento de Estado en tres días contra la decisión de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de Venezuela, integrada solo por oficialistas, de adelantar los comicios a una fecha por determinar antes del 30 de abril, cuando generalmente se efectúan a finales de año.
"La decisión de la ilegítima Asamblea Constituyente de convocar elecciones anticipadas, incluso con las negociaciones en marcha entre la oposición y el gobierno mina esas conversaciones y mina la capacidad del pueblo venezolano de participar significativamente en abordar las múltiples crisis que ha causado el régimen del presidente Nicolás Maduro", indicó el funcionario.
En este contexto, Estados Unidos promete usar todas sus herramientas "diplomáticas, políticas y económicas para que el régimen de Maduro rinda cuentas por sus prácticas corruptas, represivas y antidemocráticas", citaron medios locales y la agencia de noticias EFE.
Además, el Departamento de Estado defendió los "pasos significativos" contra el chavismo que ha tomado el gobierno de Trump en su primer año, con sanciones "a más de 40 individuos" y al sistema financiero del país.
Por otra parte, la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, también emitió ayer un comunicado sobre la convocatoria electoral en Venezuela asegurando que Estados Unidos "no se quedará de brazos cruzados mientras el pueblo venezolano continúa siendo victimizado por el régimen de Maduro".