Tras ser rescatado por personal de la Prefectura el pasado 13 de octubre, este lobo marino de Dos Pelos Sudamericano volvió a su hábitat natural, el mar.
Así, culminó un proceso de rehabilitación, llevado a cabo por la Fundación Mundo Marino, que contó dos etapas.
Durante la primera etapa, el ejemplar fue llevado al Centro de Rescate de Fauna Silvestre de la Ciudad donde se le realizaron las primeras tareas tendientes a estabilizar la salud del animal que presentaba un cuadro de desnutrición y una lesión leve en su ojo derecho.
La segunda etapa comenzó con el traslado del animal al Centro de Rescate y Rehabilitación de la Fundación Mundo Marino, en San Clemente del Tuyú.
Concluido este proceso que llevó mas de un mes, fue reintroducido con éxito al mar junto a otro ejemplar de la misma especie que también había sido rescatado por la misma entidad.