Miguel Russo, entrenador de Boca, dijo este viernes que "lo humano" es lo que más les interesa, que son "muy cautos" y por eso van "día a día", respecto de la situación del delantero Sebastián Villa, quien afronta una causa judicial por violencia de genero, denunciado por su expareja Daniela Cortés.
En rueda de prensa presencial -por primera vez desde que comenzó la pandemia de coronavirus- realizada en el predio de Ezeiza, el DT boquense evitó referirse a la decisión de la dirigencia de Boca, que meses atrás resolvió que el futbolista no juegue partidos oficiales hasta que la justicia se expida sobre el caso.
"Sebastián se entrenó siempre. Es fácil castigar y poner una norma. Que juegue amistosos no difiere de lo que pensamos y buscamos. Es parte de su entrenamiento", dijo Russo, para quien el atacante colombiano es esencial en el equipo titular, al punto de que fue la figura en los siete partidos finales de la Superliga que obtuvo Boca en marzo pasado.
"Desde el primer momento supe todo. Villa sigue trabajando desde hace cinco meses con el grupo de psicólogos y todo lo que se requiere. Con el consejo de fútbol estamos encima del jugador pero a nivel humano, fuera de lo legal y de la justicia, que es tema de abogados", agregó.
Cortés, también colombiana, de 25 años, reside en Medellín desde julio pasado, cuando viajó en un vuelo de repatriación organizado por la embajada de Colombia.
La causa está en la parte final de recolección de pruebas por parte de la fiscal Verónica Pérez, de la UFI 3 de Esteban Echeverría. A mediados de noviembre, se estima que el juez Javier Maffucci Moore comenzará a evaluar si lo procesa o le dicta el sobreseimiento.
La semana pasada, Cortés había avalado en declaraciones periodísticas la posibilidad de que Villa, de 24 años, volviera a jugar partidos oficiales para Boca. Y en el mismo sentido se expresó Fernando Burlando, abogado de la denunciante.
En cuanto a la posibilidad de renovación de su contrato a fin de año, Russo dijo: "Tengo ganas de quedarme. Formalizaremos tranquilitos y de la forma que viene el club sin ningún tipo de problema".
En cuanto al posible regreso de Cristian Pavón -en diciembre- de su préstamo en Los Angeles Galaxy, el DT sostuvo que "es jugador de Boca y si vuelve nos sentaremos a hablar, pero es muy pronto para decidir. Veremos el 1 de enero a ver qué pasa".
Sobre la lesión de Esteban Andrada, afectado en el músculo sóleo izquierdo y quien no podrá estar mañana contra Lanús, Russo dijo que el arquero no jugará "por precaución, se vienen los octavos de final de la Copa Libertadores y veremos la evolución. Quizás el lunes o martes ya esté entrenando".
Con respecto a Diego "Pulpo" González, la última incorporación boquense de este semestre, señaló: "Lo vimos bien, va de menor a mayor. Lo ponemos a punto y en la forma que buscamos y necesitamos".
En cuanto a Inter de Porto Alegre, el próximo rival por los octavos de final de la Libertadores, el entrenador dijo que "no elegís el rival, es lo que va tocando. Respetamos a todo el mundo y confiamos en nosotros"
Sobre Agustín Almendra, quien por decisión personal hace 25 días que no concurre a los entrenamientos de Boca, sostuvo que "no tuvimos mucho trato. Son resoluciones donde quedamos al margen, el tema queda por parte de él y su entorno, no hay mucho más que decir".
Cuando le preguntaron si Juan Román Riquelme, vicepresidente del club, se puede a volver a poner los cortos como insinuó hace unos días -mitad broma y mitad en serio- el presidente del club Jorge Ameal, Russo dijo entre risas: "Tiene que entrenar mucho. Entiendo al presidente, más allá del deseo, a cualquier hincha de Boca le gustaría. Ojala podamos volver a tener y disfrutar a jugadores como él".
Consultado sobre Franco Soldano, indicó que "tiene una actitud generosa. Si buscamos más, todo lo que ustedes hablan y dicen, de puertas para adentro debemos saber resolver. Boca es así. El juega de Soldano, no de lo que le pido yo. Y Tevez juega de Tevez. No hay nada diferente".
El campeón del futbol argentino visitará este sábado desde las 21.15 a Lanús, en la "Fortaleza Granate", por la primera fecha de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol, con el arbitraje de Fernando Rapallini.