Una participante que fue a jugar a "Bienvenidos a Bordo", programa que conduce Guido Kaczka, había ganado un premio pero, por decisión de la producción, terminó con las manos vacías luego de fallar en el juego del lingote.
Es que el conductor había incluido una especie de desafio en el que Guido le pregunta a los concursantes si saben chistes o adivinanzas, dando lugar a un segmento previo a la atracción principal.
En ese sentido, la cuestión consiste en contar chistes que incluyan el latiguillo "Mamá mamá". Si Guido o la secretaria Luisina y el productor Pablo no pueden adivinar el remate, el jugador se lleva un premio extra.
"Mamá mamá, en la escuela me dicen que soy celoso", dijo la participante Marcela, antes de intentar sacar el lingote. Kaczka no pudo adivinar el remate y Luisina tampoco, por lo que se terminaron rindiendo.
Luego, Marcela reveló el remate: "Mandalos al diablo', le dice la madre". A lo que el nene le responde '¿qué yo no puedo ir?'.
En un principio, Guido dio como ganadora a Marcela pero minutos más tarde reculó. "Pará, pará, que hay problemas...", dijo el conductor, quien avisó que ese "Mamá, mamá..." no era válido.
"Para mí el chiste es raro porque más que celoso, debería ser envidioso", consideró el productor. Y Guido se sumó: "Uf... osea no hay premio".
"Con esto no jodemos, disculpame pero con el mamá mamá no podemos ser laxos. No hay premios porque tendría que haber sido envidioso...", explicó Kaczka, quien chicaneó a su productor: "Muy duro Pablo, no sabía que eras así. Pero ya habías entregado el regalo...".
Y cerró: "Un momento feo, ¿viste esos momentos feos? Pero bueno, es cierto que tiene el chiste que tener sentido común".