La noticia se pudo saber desde el Ministerio de Defensa, quien brindó la información de que la Base Petrel volverá a recuperar sus capacidades y se constituirá en una Base Permanente en la Antártida al servicio de nuestro país y en apoyo a los expedicionarios antárticos del mundo.
Tal como se supo, los trabajos están a cargo del personal de la dotación de la Base y del Comando Conjunto Antártico (COCOANTAR). Las actividades están en su primera etapa y se centran en la recuperación de la habitabilidad, del galpón y del hangar principal.
Tras cumplir un período como refugio naval antártico, se ampliaron las capacidades y durante la campaña 1966/1967 fue establecida y renombrada como Destacamento Aeronaval Petrel. También fue conocida como Estación Aeronaval Petrel. A principios de la década del 70, el lugar se nombró Destacamento Naval Antártico Petrel.
Por la acción de un incendio en 1974, los moradores de ese Destacamento, se vieron obligados a evacuar y abandonar las instalaciones. Cuatro años más tarde, pasó a ser una Base Temporaria.
Durante la gestión del ministro de Defensa Agustín Rossi (2013) se anunció que, la Base Petrel, sería reacondicionada y establecida como Base Permanente y operativa durante todo el año en apoyo al Programa Antártico Argentino, de otros países y de buques turísticos. En este sentido, se nombraría el lugar como “Base Antártica Integrada Permanente de Apoyo Logístico Petrel” o bien “Base Conjunta Logística Petrel”.
A tal efecto, de acuerdo al Plan Antártico 2017, estaba planeado ampliar la pista original de 850m y llevarla a los 1800m y la construcción de otra pista de 1300m. También se están realizando trabajos batimétricos para la construcción de un muelle, y se espera el arribo del grupo científico y técnico que realizará el estudio de impacto ambiental necesario para avanzar con las nuevas obras que requiere esta base, la cual formará parte del próximo Polo Logístico Antártico.
De concretarse todas las obras (planificadas hace 5 años) la Base Petrel, tendrá la capacidad de estar conectada con casi todas las Bases Antárticas Argentinas, exceptuando la Base Belgrano II. Esto reafirma el compromiso nacional de ampliar la permanencia en el sector antártico como es histórico de nuestro país desde principios del Siglo XX. A su vez, aporta la capacidad de respuesta inmediata ante el requerimiento de apoyo y auxilio al exterior en bases vecinas.
