El gobernador, Osvaldo Jaldo, presidió el acto de creación de la Red de Instituciones Intermedias de Prevención y Asistencia de los Consumos Problemáticos. La iniciativa surge para dar una respuesta multidisciplinaria de una cuestión social y de salud pública que afecta a la comunidad. Problemática que toma relevancia, más aun, teniendo en cuenta los indicadores estadísticos de adicciones vinculados a personas que comenten delitos analizados por los tres poderes del Estado provincial.
En ese marco, el Poder Ejecutivo citó a representantes de más de 25 organizaciones intermedias que trabajan en la problemática en la provincia con la reinserción de adultos, jóvenes y niños que consumen drogas. El objetivo es complementar el trabajo de estas instituciones con lo que viene haciendo el Estado a través de distintos programas de reinserción.
“Venimos trabajando en la lucha contra el narcotráfico y con la aplicación de la nueva Ley contra el Narcomenudeo en Tucumán. Si bien el narcotráfico es facultad de la justicia federal y de las fuerzas de seguridad nacionales, nosotros venimos trabajando fuerte en el marco de la Ley Nacional de Seguridad Interior. Eso nos permitió planificar con la Policía de Tucumán, Gendarmería Nacional, Policía Federal y Policía de Seguridad Aeroportuaria y hemos avanzado en el Operativo Lapacho, cubriendo los 20 ingresos de la provincia que es por donde ingresa el contrabando y la droga”, dijo Jaldo.
Luego detalló que “hoy se está aplicando la Ley de Narcomenudeo. El narcomenudeo es toda comercialización ilegal de droga en menor escala que se realiza en la Capital y en la mayoría de ciudades y pueblos del interior. La provincia se involucró a través de esta Ley con su Policía y con su Poder Judicial. Vamos a llegar a cada uno de los lugares donde se venden drogas. Donde se comercializan y utilizan a muchos de nuestros niños y jóvenes para conseguir estos objetivos ilegales. Les vamos a caer con todo el peso de la ley”.
“Hemos invitando a las organizaciones intermedias, a la Iglesia Católica e iglesias evangélicas, fundaciones que están trabajando. La intención nuestra es trabajar de manera conjunta porque nuestro gobierno viene haciendo esta labor. Con el acompañamiento de las organizaciones, vamos a encontrar la forma de organizarnos en red, de tal manera que el trabajo que ellos hagan sea coordinado también con el Gobierno de Tucumán”, dijo. Y sostuvo: “vamos a asignar una partida presupuestaria especial que tenga que ver con atender esta problemática. Tenemos que saber cuántas organizaciones están en condiciones. Es importante estar legalmente en regla para que puedan potenciar su trabajo. Una fundación que atiende a 10 jóvenes, que podamos asistirlos para que lleguen a 20 o 25. Algunos pueden tener problemas edilicios, otros pueden tener problemas de profesionales o de funcionamiento. El Estado tiene que ayudar”.
Jaldo se refirió al documento difundido por la Iglesia Católica sobre la realidad social vinculada a la problemática: “coincido totalmente con el documento de la Iglesia. Nosotros venimos trabajando la problemática. Hay que escuchar a la Iglesia y seguir trabajando. El mensaje de la Iglesia es claro y contundente. Suma a lo que nosotros venimos haciendo. Queremos trabajar coordinadamente y en red. Yo quiero saber cuántas personas hay en tratamiento en Tucumán, no solo en la parte oficial, sino también en estas instituciones. Cuántas personas están fuera del tratamiento. Este es el sentido de esta reunión”.
Junto al Gobernador estuvieron presentes en el acto el vicepresidente de la Legislatura, Regino Amado; el legislador Daniel Deiana, presidente de la Comisión de Acciones Preventivas y Asistenciales de las Adicciones; la ministra de Desarrollo Social, Lorena Málaga; el ministro de Salud Pública, Luis Medina Ruíz; el coordinador en Políticas en Adicciones, Lucas Haurigot Posse; y el director de Salud Mental y Adicciones, Walter Sigler, además del plenario de funcionarios del Gabinete provincial.