Tragedia en Santiago del Estero: un incendio en su taller mecánico lo dejó en bancarrota, pero aún así quiere salir adelante

Quedó con una deuda de $ 100 millones, pero tiene fé en que podrá mejorar su situación.

Tragedia en Santiago del Estero: un incendio en su taller mecánico lo dejó en bancarrota, pero aún así quiere salir adelante
El mecánico que perdió todo en un incendio.

Un hombre de Santiago del Estero se encuentra viviendo una desesperante situación: es mecánico y, con mucho esfuerzo, logró alquilar un taller para poder vivir de eso. Hace unas semanas ocurrió la peor desgracia, un incendio lo dejó sin nada y ahora debe más de $ 100 millones. Además, hace pocos días, el lugar, con lo poco que le quedaba, fue asaltado. Aún así, él desea seguir adelante.

Gustavo Gómez vivió toda su vida en esta provincia y tuvo una infancia difícil: a los 2 años fue abandonado por sus padres en un hogar y su críado por el Padre Moreno, en el Oratorio Don Bosco, de quien aprendió sus valores. Desde chico le gustaban los autos y ayudaba en talleres, incluso llegó a montar un humilde espacio con su primo en la vereda.

Más de adulto y asentado, logró conseguir el dinero para alquilar un taller mecánico y así poder tener su propio lugar, donde trabaja con un empleado y su hijo más grande. “Esto no era una empresa. Éramos un equipo. Yo no venía aquí a hacer de jefe, sentarme y dar órdenes. No, yo también me ensuciaba las manos para poder llevar la comida a mi casa”, contó a El Liberal.

El fuerte testimonio del santiagueño que perdió todo en un incendio.
El fuerte testimonio del santiagueño que perdió todo en un incendio.

Este lugar era nuestra casa. Entrábamos a las 8 y salíamos a las 21 hs. Me deprime venir y ver todo esto así. Quedé en bancarrota total”. Es por esta razón que el incidente en el lugar fue tan trágico, ya que, de un día para el otro, y luego de tanto esfuerzo, el hombre se había quedado sin absolutamente nada.

El trágico incendio en el taller del mecánico de Santiago del Estero

Hace unos 15 días, Gustavo vivió su peor pesadilla: una falla eléctrica en uno de los autos que estaba en el taller generó un incendio enorme en el lugar donde trabajaba el mecánico, destruyendo todo lo que tenía, tanto herramientas de trabajo, como los vehículos de sus clientes.

“Cuando llegué al galpón y vi que todo estaba envuelto en fuego, lo primero que pensé es en la perra con sus cachorritos que dormían adentro. Me acerqué, pero los Bomberos no me dejaron pasar más, todo estaba envuelto en llamas. En ese momento se me vino el mundo abajo. Perdí el esfuerzo de toda mi vida. Yo empecé debajo de un algarrobo y con unas cuantas herramientas hasta que puede ahorrar para construir todo lo que había logrado y lo perdí en segundos”, se lamentó Gómez.

Además de perder su propio capital de trabajo y quedar endeudado, el santiagueño se siente muy culpable por la pérdida que generó en sus clientes, la cual no puede recuperar. “No me alcanzará esta vida ni otra para devolver todo. Es muchísimo lo que perdimos”, explicó.

El galpón que alquilaba el santiagueño quedó destrozado.
El galpón que alquilaba el santiagueño quedó destrozado.

Además, aclaró: “Me duele por todos, pero me pesa más no poder darle una respuesta al dueño de una camioneta Chevrolet S-10 que es de un hombre excombatiente de Malvinas que ahora está enfermo” y luego agregó: “Me gustaría devolverles todo a todos, pero la situación de ellos me afecta, no me deja dormir”.

Sobre el dueño del espacio que él alquilaba dijo: “Es quien mejor se portó. No me presionó para que refaccionara el lugar, al contrario me ofreció ayuda. Ahora tengo que ver cómo hago para devolver todo. Las ganas tengo, lo que no tengo son los medios”.

Además, explicó que él tiene seis hijos y que su esposa es quien más lo está ayudando en este momento: “Por ahora la que banca todo es mi señora. Es la que está apoyándome y me levanta y me da ánimos cada vez que quiero caer. Ella es un gran pilar”.

Como si fuera poco, con todo perdido por el fuego, días después del incendio, un hombre entró al galpón a robar partes de autos robadas, lo cual indignó mucho al mecánico, aunque, afortunadamente, pudo recuperarlas.

Por otro lado, Gustavo contó que tiene muchas ganas de seguir adelante y que lo que más necesita en este momento es conseguir un trabajo. “Me encamino en las manos de Dios y en la guía del padre Moreno para poder salir de esto. Me gustaría tener la posibilidad de devolver los vehículos, ahí mi conciencia estaría tranquila. Ahora no tengo ni para comprar una llave”, expresó.

El santiagueño compartió su número de cuenta bancaria para todos quienes quieran y puedan ayudarlo: Alias: FTORRES.467.BAP CBU: 4530000800011875446390.