Luego de un juicio oral y público en el que lo declararon culpable, este miércoles falleció Pablo Gazze en un siniestro vial. El médico chocó tras haber sido condenado por abuso sexual en Reconquista, donde permanecía en libertad bajo fianza y bajo ciertas reglas de conducta.
Hacia las 19, el flebólogo de 44 años iba a bordo de un Honda Civic y se estrelló contra un árbol en el paraje El Carmen. Cuando la policía llegó al sitio de la colisión en la Ruta Provincial 31, constató que el deceso fue instantáneo.
El choque fatal ocurrió el día después del fallo por el que Gazze fue condenado a 17 años de prisión efectiva. Su defensor cree que se suicidó tras el debate en los Tribunales de la cabecera del departamento General Obligado.
El abogado Raúl Elías recordó que el médico había depositado 5 millones de pesos para salir en libertad y entregó su pasaporte como parte de la morigeración de las medidas cautelares. Detenido en julio de 2020, pasó siete meses en la cárcel como parte del proceso por las denuncias en su contra.
A la hora de repasar la situación previa al siniestro, el letrado confirmó que se reunió con su cliente y lo despidió a las 18. El flebólogo se fue hacia su casa de Avellaneda, donde cambió de auto y le dijo a su esposa que iba a ver a sus hermanos, algo que nunca ocurrió.
¿Por qué condenaron a Pablo Gazze en Reconquista?
Pablo Gazze fue condenado este martes a 17 años de prisión por abuso sexual con acceso carnal y otros cinco hechos de abuso sexual gravemente ultrajante. En todos los casos denunciados, las víctimas eran pacientes del médico en su consultorio de Reconquista.
De acuerdo a la investigación del Ministerio Público de la Acusación (MPA), el flebólogo agredió a las seis mujeres entre mayo de 2014 y diciembre de 2019. Una séptima persona hizo la denuncia, pero decidió no participar en el juicio.
El tribunal integrado por Norma Senn, Gonzalo Basualdo y Martín Gauna Chapero consideró probado que el flebólogo abusó de sus pacientes mientras las atendía. El fiscal Juan Sebastián Marichal recordó que estos hechos ocurrieron en el marco de tratamiento de várices.
El funcionario judicial precisó que las víctimas recibían inyeccones en las piernas durante sesiones de escleroterapia. En ese contexto “vulneró la integridad sexual” de las mujeres denunciantes.