Oscar Araya contó lo que vivió en la madrugada del lunes cuando acudió a socorrer a la familia Cosentino cuando se incendiaba la casa en Rama Caída.
Araya vive en la calle Mora 365, la vivienda contigua a los Cosentino.
En diálogo con LV 4 radio San Rafael, el hombre aseguró que todavía está "muy afectado por lo vivido" esa noche,
"Llego corriendo y me encuentro al pibe, a Genaro, en la calle todo lleno de ampollas. Dijo que se había prendido fuego la casa pero no habían podido salir todos", relató.
La policía estaba tratando de arrancar la reja y no podían", por eso corrió a su casa, regresó con un alargue "y con la moladora cortamos la reja", agregó.
Cuando Araya entró a la casa "ya venía un policía con la nena en brazos, la sacamos y ella estaba consciente, nos hablaba y estaba muy quemada. Quemaduras en el rostro y en el cuerpo. Luego llegaron los bomberos, la pusieron en una camilla y la trasladaron", dijo consternado.
Según el vecino, el primero en abandonar la casa envuelta en llamas fue el adolescente y le siguió el padre. Ambos atravesaron las llamas y después rescataron a la madre y los niños pequeños.
Araya aseguró que la joven de 16 años se llevó la peor parte al permanecer más de media hora dentro de la casa abrasada por el fuego.
"Hasta ahora siente ardor en el estómago y ojos y dolor de cabeza, por la inhalación de humo", sostuvo Araya.
Por último destacó la labor de la policía y en particular del oficial Osorio que sin importar las circunstancias (sufrió intoxicación por monóxido de carbono), rescató a Antonela.