Con las firmas del intendente Manuel Passaglia y del secretario de Economía y Finanzas, Miguel Ángel Battaggia, hace poco más de dos meses se abrieron nuevos procesos licitatorios para completar las etapas quinta y sexta del Estadio Municipal, hoy adjudicada a la constructora D'Almeida Bico Hnos. S.A., única oferente.
El objetivo es la construcción de los palcos altos y bajos, incluyendo la provisión e instalación de un ascensor, dos boleterías, una plataforma hidráulica para el acceso de personas con movilidad reducida y la red de incendio.
La obra tiene un plazo de ejecución de cuatro meses, a contar a partir de la firma del contrato, con una inversión que ronda casi los $50 millones.
Si todo transcurre por los carriles normales, para mediados de 2019 podría quedar inaugurado con un partido o un espectáculo musical, las dos opciones que baraja el Municipio. Pero lo cierto es que el retraso en los trabajos había generado ciertas suspicacias, sobre todo respecto por las medidas reglamentarias del campo de juego. Cuestión que el propio Darío Gritti, al frente de la cartera de Obras Públicas, salió a desmentir.
"El campo de juego adhiere a la reglamentación FIFA. Parece que la gente siempre tiene ganas de que las cosas salgan mal. Me hace acordar a cuando se hablaba tanto del viaducto y de que no iban a pasar los colectivos", se despachó el funcionario. Y sostuvo: "El rumor viene de unas imágenes tomados por Google Earth, una aplicación que no saca una foto real, sino angulada".
