Un curioso hecho de robo se produjo en la mañana de este jueves y la víctima recién se dio cuenta cuando se levantó. Cerca de las 8, fue hasta el garaje y notó que el portón estaba descalzado y había sido forzado.
Ocurrió en una vivienda de Francia al 300, a pocas cuadras del Santuario. Le llevaron dos bicicletas, una amoladora y una soldadora.
La mujer denunció el robo por la tarde e hizo su descargo en la Comisaría Primera, por jurisdicción. Lo más llamativo es que los ladrones fueron casi imperceptibles y nadie se percató de lo que estaba sucediendo. De momento, no hay detenidos pero el testimonio de algún vecino podría ser clave para dar con los responsables.
(Fotografía: Prensa Libre SN)