La misma modalidad y –se presume- el mismo atacante. Pese a las advertencias, otra joven volvió a ser víctima del hombre que se exhibe con los pantalones bajos en una parada de colectivos. La mujer –de quien se preserva su identidad- advirtió el hecho a los medios para encender el alerta.
Alrededor de las 5:15 del martes, un día después del anterior episodio, estaba en la parada de Rivadavia entre Ponce de León y Echague cuando advirtió la desagradable escena. De inmediato, empezó a gritar y se comunicó con el 911 para proteger su integridad y evitar que se acercara.
"Estaba con una campera con capucha azul o negra. No pude distinguir bien porque era de noche y llovía bastante", declaró la muchacha, quien no hizo la denuncia porque se fue a trabajar. "El miedo y la bronca que sentía me paralizaron. Me fui llorando como tonta durante todo el viaje", sostuvo.
En la jornada del lunes, una chica de 26 años también había sufrido una situación similar en barrio Don Bosco mientras esperaba el colectivo para llegar al centro. Alcanzó a subir el micro en medio de gritos y después dejó radicada la denuncia con el fin de que se pudiera identificar al sujeto.
