En la madrugada del miércoles, una familia sanjuanina fue sorprendida por dos delincuentes en el barrio Ayres Village III, en el departamento Rivadavia. Encapuchados y armados, los sujetos ingresaron a la vivienda por la puerta principal y mantuvieron maniatados al matrimonio por más de tres horas mientras se llevaban todo. Robaron desde joyas e indumentarias hasta electrodomésticos y una bordeadora.
Después de recibir a unos amigos, Oscar Culleri y su esposa se acostaron a dormir sin imaginar la pesadilla que iban a vivir en un par de horas. Mientras descansaban en la segunda planta de la casa, los malvivientes burlaron la seguridad privada –cortaron un boyero e hicieron un agujero en el alambrado sin que sonara la alarma- e ingresaron al domicilio. Luego les apuntaron con revólveres y los amordazaron.
"Cuando escucho un ruido me despierto y ya los tenía adentro, ambos encapuchados y con guantes apuntándonos con revólveres. Nos dieron vuelta, nos ataron, nos dijeron que no nos moviéramos porque nos iban a hacer boleta. Se llevaron de todo, zapatillas, ropa, televisores, cosas insólitas como una bordeadora, relojes, anteojos, anillos, pulseras. Pero lo peor de todo es el daño psicológico, gracias a Dios no nos mataron, pero la sensación fue horrible", declaró Oscar a Tiempo de San Juan.
El matrimonio no se explica cómo los ladrones ingresaron al predio, sobre todo a su casa, cuando en el lugar hay alarmas y personal custodiando el perímetro durante las 24 horas: “No entiendo qué estaban haciendo. Pagamos fortuna por el servicio. Mi casa es súper segura, no es tan fácil abrir las puerta-ventanas porque las cerraduras están del lado de adentro. Se suponía que iba a ser más tranquilo pero parece que vinimos a sufrir aquí".