Una pesadilla fue la que vivió una joven madre en julio de 2015. Un agente de la policía la paró para un supuesto control vehícular, el uniformado la llevó a un descampado e intentó violarla. Por el aberrante hecho, el Ministerio de Gobierno decidió expulsarlo de la fuerza de seguridad. El decreto con la expulsión fue publicado en el Boletín Oficial.
El aberrante hecho fue protagonizado por Adrián Moreno, quien prestaba servicios en la Motorizada 5 de Chimbas. Fue él quien paró a la jovencita a un baldío y la manoseó. Moreno contó con un cómplice, Erick Castro, quien custodiaba que nadie pasara por la zona mientras su compañero se propasaba con la víctima. Sobre él recayó una sanción disciplinaria mucho más leve y continúa prestando sus servicios en las fuerzas de seguridad.
El 31 de julio del 2015 se produjo el hecho que terminó en denuncia. La joven fue interceptada por dos agentes policiales para un control de tránsito. Con una escopeta, le exigió que le mostrara la documentación de la moto. La víctima contestó que no la tenía porque había salido un rato para busca a su hijo. El policía le dijo que fueran a un descampado si no quería que le llevara la moto. La joven fue. Insistentemente el ex agente le pedía el número de celular, la chica accedió a dárselo. Cuando se iba yendo, Moreno la manoseó, la tiró al suelo y le quiso sacar la remera.
La identidad de la joven fue resguardada. Según consta en el informe, pudo zafar pegándole una patada a Moreno. En la actualidad el ex policía trabaja en una empresa de seguridad. Estuvo preso, pero como fue procesado por abuso sexual simple no fue a prisión.
