Agustín Espinoza tiene 19 años y el 22 de mayo cayó por robo. Fue juzgado por flagrancia en menos de 24 horas y lo condenaron a dos años de prisión en suspenso. Lo llamativo es que el sujeto recuperó la libertad y volvió a caer a las horas por otro robo.
Personal de la Brigada de Investigaciones Norte lo detuvo luego de que las cámaras lo captaran robando en una empresa dedicada a la fabricación de aluminio, en la zona de Marquesado. La investigación policial empezó luego de que los propietarios de la empresa denunciaran el hurto. Fue así como revisando las cámaras de seguridad dieron con Espinoza.
El joven quedó en libertad porque el robo que cometió el 22 de mayo fue de características menores. Además no era dueño de un gran prontuario. Estos factores fueron claves para el Tribunal, que decidió darle la libertad. Ahora que cometió otro delito, la pena que enfrenta será mayor.