Salieron a festejar el fin de curso, hubo disturbios y un menor demorado

Ocurrió en San Juan donde un grupo de adolescentes del último año festejaba el fin de curso en una plaza.

Escándalo entre alumnos y la policía.
Escándalo entre alumnos y la policía.

Este miércoles, un grupo de adolescentes festejaba el fin de curso en una plaza de la provincia de San Juan y todo terminó mal cuando apareció la Policía. Según informó el diario Tiempo de San Juan, ocurrió cerca de las 13 cuando varios chicos del Colegio Nacional, ubicado en pleno microcentro sanjuanino, se juntaron en la Plaza Aberastain, a cuadras del establecimiento.

Según el relato de los menores, estaban sentados conversando y festejando cuando aparecieron uniformados de la Comisaría 3ra para decirles que se tenían que ir. Como uno de ellos se negó a hacerlo, los efectivos se lo llevaron demorado y cuando lo subían al patrullero hubo forcejeos y menores bloqueando el móvil policial para evitar que detuvieran a su compañero. "Salimos de un acto y nos vinimos a la plaza. Vinieron los policías y nos empezaron a decir que nos fuéramos, que éramos muchos, que no podíamos estar ahí", explicó uno de los chicos.

Por su parte, el comisario Sergio Quiroga a cargo de la dependencia, sostuvo al medio local que sólo intentaba despejar la calzada porque los estudiantes estaban bloqueando el paso de los autos. Sin embargo, los adolescentes lo desmienten y aseguran que detuvieron a un menor porque los estaba filmando con el celular.

"Me dijeron que me llevaban porque había estado grabando y eso no se podía hacer. El policía me decía que le mostrara el celular y lo formateara y yo me negué. El policía me quitó el celular de la mano. En ese momento los chicos empezaron a gritar y a preguntar por qué me había quitado el celular, y el policía me lo devolvió y me dijo que me iba a llevar detenido", relató Daniel Luján, el alumno de 17 años que terminó preso.

Después de dos horas en la Seccional, Luján fue liberado. "En el camino a la comisaría me preguntaron de dónde era y les dije que esto no iba a quedar así. Me dijeron que muriera callado. Ahí llegamos a la comisaria, el policía, me agarró el cuello y me trasladó al calabozo. Nunca estuve haciendo nada, dicen que lo insulté, que le falté el respeto y en ningún momento hice eso. Hay un montón de videos y cámaras de seguridad que demuestran lo contrario", sostuvo el joven.