Hace más de un año, una mujer denunció haber sido drogada y luego abusada sexualmente por un enfermero mientras se atendía en una clínica privada de Salta. El martes 14 de junio finalmente el fiscal de la causa decidió imputarlo y solicitó que sea juzgado.
Según detalló Que Pasa Salta, el episodio se habría desarrollado el 15 de marzo del 2021. La víctima aseguró que, aquel día, le inyectaron un protector gástrico y la derivaron a la UTI (Unidad de Terapia Intensiva).
No obstante, por la noche, cerca de las 00:00 horas, un enfermero le administró otro medicamento, diciéndole que era el protector gástrico, el cual no le correspondía y la mujer le aclaró que dos horas antes le habían dado uno.
La salteña entonces se durmió y despertó alrededor de las 2:15 de la madrugada tapada con una sábana. Su pijama y ropa interior estaban bajados a la altura de su rodilla y presentaba un fuerte dolor en sus partes íntimas.
Asustada, decidió levantarse y se dio cuenta que le caía un líquido de entre las piernas. La médica de guardia le dio un papel para que se limpiara y, acto seguido, la denunciante solicitó la presencia de personal policial.
La trasladaron a una habitación de piso donde supuestamente podría comunicarse con los efectivos, aunque el teléfono no funcionaba para llamadas al exterior.
Pasadas algunas horas, logró bajar a la guardia y alertó que fue abusada por un enfermero, pidiendo que llamaran al 911. La denuncia fue efectuada y la mujer fue sometida a algunos exámenes físicos donde se constató que había sido víctima de una violación.
El fiscal de la causa, Federico Obeid, investigó las cámaras de seguridad de la clínica y notó que alrededor de la 1:04 de la mañana el acusado tapó el lente que vigilaba el lugar donde la paciente se encontraba en reposo.
Para la 1:25 la cámara fue destapada. De esta forma se lo interrogó y reconoció que, esa noche, le inyectó Lorazepam a la mujer, en vez del protector gástrico como le había comentado a la salteña.
Este medicamento, que no estaba indicado para la víctima, se usa para aliviar el ansiedad. Se encuentra dentro de los benzodiacepinas y funciona para ralentizar la actividad del cerebro para permitir la relajación.
Finalmente, y frente a todas las pruebas recabadas, el fiscal solicitó que la causa se eleve a juicio. El enfermero, entonces, fue imputado por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante por las circunstancias en que efectuó el crimen.