Luego de la aprobación de la ley de interrupción voluntaria del embarazo desde la gerencia del Materno Infantil de Salta calificaron como excesiva la cantidad de abortos legales que se realizaron en el hospital público durante los últimos meses. A la fecha van 42 intervenciones, según el médico Federico Mangione. La cifra llegó a oídos del arzobispo de Salta, Mario Cargnello, quien pronunció una dura crítica al respecto durante la misa por el Domingo de Ramos de la religión católica.
“Ya pidieron aborto embarazadas de 38 semanas. Esto significa extraer un niño o niña con vida y matarlo. Abortar después de la 11ª semana es romper un niñito que ya va formando su sistema óseo, quebrarlo para que se muera. Un legrado se convierte en una Gillette que corta con el riesgo de dejar a la mujer imposibilitada para ser madre en el futuro. Este es el panorama”, señaló de forma cruda Cargnello en su homilía
Monseñor también aseguró que tras la puesta en vigencia de la ley aumentaron las enfermedades de transmisión sexual. “La aprobación y generalización de las prácticas anticonceptivas de primera instancia (píldoras anticonceptivas, preservativos, etc.) han impulsado la consideración y el ejercicio de una sexualidad sin compromiso, irresponsable y paulatinamente descuidada. Esto se ha aumentado con la posibilidad de recurrir al aborto”, sentenció en una dura crítica a los legisladores que aprobaron el proyecto.