Se cumplen 10 años del crimen de las turistas francesas, Cassandre Bouvier y Houria Moumni, en una zona turística denominada Quebrada de San Lorenzo, a 15 kilómetros de la Capital salteña. En un extenso juicio realizado en 2014, la Justicia condenó a Gustavo Lasi a 30 años de prisión tras resultar autor de los asesinatos.
También fueron a juicio otros dos imputados, Daniel Vilte y Santos Vera, quienes fueron absueltos, aunque en 2016 el Tribunal revocó la decisión y condenó al segundo a cadena perpetua. Hay dos hombre detenidos por el femicidio: Gustavo Lasi, cuyos rastros genéticos estaban en los cuerpos de las víctimas, y Santos Clemente Vera, considerado inocente por el papá de una de las chicas, Jean Michel Bouvier, quien buscó ayuda para sacarlo de la cárcel.
Las familias de Cassandre y Houria se enteraron que las chicas habían sido asesinadas por las noticias. Jean Michel, papá de Cassandre, se convirtió en el estandarte de la búsqueda de justicia para su hija. Estuvo presente durante el juicio y cada tanto viaja a Salta en busca de paz para su alma. Denuncia irregularidades en la investigación. “Está pendiente aún en la Corte que se reabra la causa, el año pasado hice una carta para los jueces mediante los abogados, pero nunca tuve una respuesta. Estoy deseando que se reabra la investigación desde cero, que se usen todas las herramientas que se tiene, como los ADN encontrados en Francia. La Justicia tiene el deber de usar cualquier herramienta que tenga a su alcance para investigar”, adelantó en una entrevista con El Tribuno.
Bouvier asegura que hay muchas incoherencias que justificarían la reapertura de la causa, como la data de muerte de Cassandre y Houria. “También el hecho de que no tenían más sus pertenencias, el teléfono y cámara de Houria determinaron que las había robado Lasi. El teléfono y la cámara de Cassandre nunca fueron encontrados. Pero según los documentos, cuando detuvieron a Fernanda Cañizares, figura que le devolvieron una cámara que nunca fue investigada y que no se describió el modelo ni el número de serie. Pero se sabe que podría ser la cámara de Cassandre. Esa es una de las irregularidades también”, destacó y volvió a insistir en la inocencia de Santos Vera: “No hay ninguna prueba ni elemento científico que lo incriminara a Vera”.