Al margen del golazo que convirtió para París Saint-Germain (PSG) en el partido decisivo, Lionel Messi no fue el único que se fue con una sonrisa este sábado como ganador del campeonato francés. Sus hijos entraron a jugar a la cancha después de la consagración y se dieron un gran gusto en paralelo con el festejo de su papá.
Tal como lo hicieron cuando el rosarino se incorporó al equipo, los herederos de la “Pulga” tuvieron otra chance de pisar el campo del Parque de los Príncipes como si fuera el patio de su casa. Así, los chicos se hicieron cargo del tercer tiempo tras el empate con Lens.
Aunque su papá no los acompañó, Mateo Messi y su hermano menor Ciro salieron a correr sobre el césped con otros niños después del encuentro en el que se definió el campeonato francés. Como jugador de lujo estuvo Keylor Navas, que se hizo cargo de armar el picado en una de las áreas de la cancha.
El arquero costarricense fue el protagonista de un final de jornada atípico en el Parque de los Príncipes, rodeado de los pequeños en uno de los momentos tiernos que quedaron como recuerdo de la consagración de PSG como local.
Los Messi se mudaron a Francia en agosto, cuando Leo firmó contrato con el equipo francés después de su salida del Barcelona. Desde entonces, sus hijos se instalaron en París junto a su esposa Antonela Roccuzzo, que también lo acompañó en esta nueva etapa de su carrera deportiva.