En el vasto mundo de las redes sociales, donde cada gesto de las celebridades se convierte en noticia, la historia de una abuela de 98 años y su inesperada interacción con Lionel Messi se ha robado todas las miradas. El episodio, que transcurrió durante un partido del Inter Miami, conmovió a todo el mundo.
La protagonista de esta singular anécdota es Pauline Kana, cariñosamente conocida como “Granny”. A sus 98 años, Granny demostró que la pasión por el fútbol y la admiración por un ídolo no tienen límites de edad. Con una energía admirable, se hizo presente en el Mercedes Benz Stadium de Atlanta, dispuesta a cumplir un objetivo claro: acercarse a su ídolo.

Para lograrlo, Granny diseñó un cartel que rápidamente se hizo notar en las gradas. Con letras grandes y un mensaje directo, el cartel rezaba: “Messi, te amo. La edad es solo un número”. La imagen de la abuela sosteniendo el letrero con una sonrisa pícara fue una de las primeras en inundar las redes, atrayendo la atención de miles de usuarios.
La repercusión de su cartel fue tal que la organización del evento, conmovida por su dedicación, le brindó una oportunidad única. Granny fue invitada a acercarse al campo de juego, un privilegio que pocos fanáticos logran. Su determinación y su carisma fueron recompensados con la posibilidad de estar más cerca de su admirado futbolista.

El momento culminante llegó cuando Messi, durante el calentamiento previo al encuentro, percibió el cartel. Con una mirada curiosa, leyó el mensaje. Su reacción fue inmediata y genuina: una sonrisa tímida se dibujó en su rostro, acompañada de un gesto de saludo con la mano. La escena fue capturada en video y, en cuestión de minutos, se convirtió en un fenómeno viral.
El video de la interacción se difundió a gran velocidad, generando comentarios de admiración y ternura en todas las plataformas digitales. Los usuarios celebraron la humildad del ídolo y la audacia de Granny.
Pero la historia de Pauline Kana no es nueva en el mundo de los medios. En Estados Unidos, Granny es una personalidad reconocida, con casi cuatro millones de seguidores en su cuenta de Instagram. Su fama se remonta a sus inicios en la extinta red social Vine, donde se hizo conocida por sus divertidos videos junto a su nieto.
La tímida reacción de Messi demostró que, más allá de la fama, su sencillez sigue siendo una de sus mayores virtudes.
Para Granny, el gesto de Messi fue el broche de oro de una aventura inolvidable. “Me siento muy feliz”, expresó la mujer, visiblemente emocionada, sintiendo que había logrado su cometido de captar la atención de su ídolo.