Desde que se confirmó la muerte de Sofía Delgado en Ricardone, la hipótesis del femicidio se mantiene en primer plano. La teoría ganó peso este domingo a partir de los resultados de un nuevo peritaje en Puerto General San Martín, uno de los puntos claves del mapa del caso que rebasó los límites de la ciudad de San Lorenzo.
El procedimiento se llevó a cabo horas después del velatorio de la joven en la cabecera del cordón industrial del norte del Gran Rosario. El fiscal Carlos Ortigoza pidió un segundo relevamiento del galpón de Corrientes al 100, el sitio donde la policía secuestró el auto asociado a la desaparición de la víctima de 20 años.
¿Qué dieron los últimos peritajes del caso Sofía Delgado?
El personal enviado por el Ministerio Público de la Acusación (MPA) realizó un test de luminol positivo en el taller mecánico de Puerto General San Martín. Esto permite detectar rastros de sangre, de modo que la Justicia ordenó el análisis de las muestras biológicas recolectadas.
Los análisis del laboratorio forense pueden convertirse en evidencia fundamental del femicidio de Ángela Sofía Delgado. La sanlorencina desapareció la noche del 30 de octubre y la Policía de Investigaciones (PDI) encontró su cadáver dos semanas después de la denuncia, cuando fueron a inspeccionar un camino rural de Ricardone.
Pasaron 14 días desde que la joven se fue de su hogar hasta que la Fiscalía Regional de Rosario reportó novedades de la búsqueda. Poco después del anuncio de una recompensa de $ 5.000.000, los investigadores identificaron a Alejandro Bevilacqua y Miranda Leguizamón como los primeros sospechosos.
El pedido de captura se hizo efectivo en Pergamino, pero no son los únicos detenidos. Los últimos cinco allanamientos que coincidieron con el hallazgo del cadáver incluyeron el arresto de Eduardo Mordini, el propietario del taller en el que estaba guardado el Peugeot 308 gris que fue filmado frente a la casa de Sofía.
La pareja del mecánico, Natalia Palavecino, también quedó privada de su libertad a la espera de la audiencia imputativa en San Lorenzo. Lo mismo ocurrió con Brian Bauman, empleado del dueño del galpón del barrio San Sebastián de Puerto General San Martín.
Imagen: Juan José García.