La Justicia provincial de Rosario ordenó este domingo la prisión preventiva de un subjefe policial por un robo multimillonario que involucra a otros seis integrantes de la fuerza. Según el Ministerio Público de la Acusación (MPA), mintieron sobre un operativo realizado en abril para llevarse un botín en dólares en el barrio Nuestra Señora de la Guardia.
Darío Germán Carrillo continuará detenido como el principal sospechoso de la causa sobre hurto doblemente calificado en una casa de la zona sur. También lo imputaron por falsedad ideológica y tenencia ilegal de un arma de fuego de uso civil.
¿Cómo fue el operativo por el que denunciaron a siete policías de Rosario?
De acuerdo a la evidencia reunida por la dirección de Asuntos Internos de la Policía de Santa Fe, el subjefe de la Comisaría 15° intervino en un procedimiento realizado el 14 de abril en la zona de la seccional. A partir del reclamo de un familiar, la Fiscalía Regional de Rosario advirtió que el personal involucrado se había quedado con 76.900 dólares luego de la requisa de la vivienda.
Carrillo llegó a la casa a las 00.10 junto con Marcelo Gómez, encargado del del Grupo Táctico Multipropósito (GTM) que envió el MPA. La orden recibida por ambos sólo consistía en resguardar a las personas menores de edad, mientras que al dueño del inmueble le abrieron una causa por tenencia ilegal de armas de fuego.
Los declaraciones presentadas por el fiscal José Luis Caterina sugieren que el subjefe de la Comisaría 15° habló con los familiares cuando le avisaron que había una fortísima suma de dinero en moneda extranjera. En ese momento le dijo al padre que todos serían detenidos si había indicios de que estaban vinculados a la venta de drogas.
Un testigo escuchó que otro policía con pasamontañas había mandado un mensaje en el que se refería a una denuncia sobre lavado de activos en el domicilio. Los investigadores presumen que fue Gómez, uno de los cinco agentes que quedó en libertad tras el pago de una fianza de 500.000 pesos.
Salvo por unos 7.900 dólares procedentes de la venta de un vehículo, el resto del botín estaba guardado dentro de la casa. Todo el botín fue retirado “en forma secreta”, según la denuncia contra el personal de las fuerzas provinciales de seguridad.
Las autoridades judiciales creían que la plata había sido devuelta a la familia según el acta de procedimiento, pero descubrieron que la información era falsa. El documento original tiene las firmas de los suboficiales Joaquín Gerominez, Romina Acosta, Brenda Alderete y Amílcar Madera, pero la copia recibida por Asuntos Internos sólo incluía los dos primeros nombres.
Finalmente, el juez Rodrigo Santana ordenó la prisión preventiva domiciliaria de Andrea González por encubrimiento agravado. El MPA sosepecha que recibió el dinero obtenido ilegalmente por sus compañeros de la Comisaría 15° y lo utilizó para el “pago de asuntos particulares”, incluso en compañía de Carrillo en una oportunidad.
