El control de la seguridad en los taxis es un tema sensible sobre todo por la exposición de los conductores que circulan por todas las zonas de la ciudad y suelen sufrir de cerca el asedio de los ladrones.
La novedad alrededor de las políticas de prevención del delito es que el jefe de la Unidad Regional II de policía, Marcelo Gómez, optó por formar parte personalmente de un grupo de WhatsApp con taxistas, como suele ocurrir con los vecinos de una cuadra o un barrio como herramienta para alertar sobre sospechosos merodeando una zona.
"En realidad el grupo está integrado por referentes taxistas y se formó después de la última reunión", describió Gómez, que se hizo cargo de la departamental Rosario luego de la última saga de balaceras sobre domicilios vinculados a magistrados que intervienen la causa Los Monos.
"La estrategia es de contar todos con la misma información. No es un grupo para denuncias. En realidad sirve para alertar sobre personas sospechosas. Los taxistas trabajan en al calle y colaboran para detectar sujetos sospechosos. Recibo ésa información y la canalizo al personal subalterno", mencionó el jefe policial, en contacto con Radio 2.
Consultado sobre la confianza en personal subalterno, debido a que es el propio jefe policial el que participa en el grupo de WhatsApp, el funcionario policial dijo "estoy yo en el grupo porque soy yo quien participa en las reuniones con los referentes gremiales de los taxis".