Después de la detención de un policía de la zona oeste acusado por extorsión, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) dio a conocer las imágenes del operativo en el que la unidad de Asuntos Internos arrestó al uniformado mientras recibía el dinero que había pedido para destruir pruebas de un robo que supuestamente había cometido el denunciante.
"Cinco milanesas" fue lo que le pidió textualmente el suboficial al muchacho de 30 años al cual le había advertido que figuraba como cómplice del asalto a una casa de electrodomésticos. Rodrigo B. había recibido una captura de pantalla del video de las cámaras de seguridad del local, pero aclaró antes las autoridades que uno de los dos sospechosos implicados no era él sino el marido de la prima de su esposa.
La conversación por Whatsapp comenzó el jueves 19 de julio y también hubo llamadas telefónicas para amenazar al muchacho de 30 años y exigirle los cinco mil pesos a cambio de destruir las supuestas pruebas en su contra. Si bien se había presentado como personal de la Comisaría 19°, el imputado estaba asignado a la seccional 32 en barrio Godoy.
"No seas boludo, llamame. Si te hubiese querido meter en cana, lo hubiera hecho porque sé dónde vivís, trabajás y lo que hacés de noche", le advirtió Quiroga en uno de los mensajes que presentó durante la audiencia imputativa la fiscal Karina Bartocci.
Rodrigo decidió denunciar el apriete ante la Justicia y la unidad de Asuntos Internos empezó a preparar el operativo para arrestar a su colega in fraganti. Para seguirle la corriente, le respondió: "Dame hasta el martes".
Ese día, el suboficial esperó a la víctima en Bulevar Seguí y Rouillón para cobrar el efectivo. Los billetes de 500 y 100 pesos estaban marcados y había copias firmadas por las autoridades para luego controlar que se trataba del mismo efectivo reunido para probar la extorsión. Después del procedimiento, el policía quedó en prisión preventiva por 90 días.