En la madrugada del martes cayeron 160 milímetros de agua en la localidad de Ramona, que se sumaron a los 150 que habían caído el día anterior. "Se inundó el 80% del casco urbano y el 40% de las viviendas tuvieron agua en su interior", dijo el presidente comunal, Fabio Barbero. La situación cambió por completo días después.
El temporal había obligado a evacuar a 20 familias en el salón parroquial y en el centro cultural de Ramona, ya que tenían medio metro de agua adentro de sus casas. La situación era sumamente compleja porque los desagües o canales eran muy pequeños para dar respuesta a la gran cantidad de agua acumulada en la localidad del oeste del departamento Castellanos (donde está Rafaela).
El director provincial de Defensa Civil, Marcos Escajadillo, había indicado que se trataba de la zona que se había visto más afectada por el temporal. Por eso se dispuso la conformación de un anillo de defensa y se puso a trabajar a full a máquinas y bombas extractoras.
“La situación irá mejorando si el clima nos da una ventana de tiempo para terminar estos trabajos y proteger la localidad”, había apuntado. El clima ayudó, los vecinos colaboraron a destajo para agilizar las tareas de destape de desagües y el agua fue bajando.
Al cabo de tres días, sólo quedaron un par de charcos pero la situación ya estaba totalmente bajo control. La ayuda se completó con el envío de una cuba con 30 mil litros de agua potable, colchones y alimentos. Más tarde la EPE logró reponer el servicio en toda la localidad.
Sin embargo en todo el departamento siguen atentos al pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional, que avisa sobre posibles nuevas lluvias.