Los jueces de primera instancia condenaron a 13 años de prisión a un hombre acusado de matar a un joven durante una fiesta de 15 y absolvieron a su sobrino quien, según la Fiscalía, le habría entregado el arma con la que cometió el crimen.
El fiscal Adrian Spelta, de la Unidad de Homicidios, los había acusado formalmente por el hecho ocurrido e 1 de marzo del 2015 a la medianoche en Garzon Bis 1000.
A la fiesta, en la que estaban invitados Oscar Alberto Acosta (tío) y Luis Carlos Acosta (sobrino), llegó Carlos Gastón Villa, de 25 años, quien mantuvo una reyerta en la puerta del lugar e hirió a uno de los imputados, tras lo cual el mayor le disparó, según la acusación. La víctima fue traslada al hospital Eva Perón donde falleció días más tardes producto del disparo.
La defensora oficial del menor de los acusados pidió la absolución del muchacho al considerar que Villa era un muchacho pendenciero cuando se alcoholizaba y que eso produjo la pelea en la puerta de la casa donde se festejaba el cumpleaños. Aseguró que su defendido, como lo conocía trató de calmarlo pero lejos de ello terminaron propinándose golpes de puño y la víctima lo hirió con un arma de fuego en el brazo por lo que se retiró del lugar y cuando se efectuaron las detonaciones que lo mataron él se encontraba esperando un remís para ir a un hospital.
El tribunal a cargo del debate integrado por Gonzalo Lopez Quintana, Gustavo Perez Urrechu y Ramón Lanzon sentenciaron a la pena de 13 años de prisión efectiva a Oscar Alberto Acosta, de 44 años, por el delito homicidio agravado por el uso de arma de fuego en concurso ideal con portación ilegítima de arma de fuego de uso civil; y absolvieron a Luis Carlos Acosta, de 22 años, por el estricto beneficio de la duda.
El fiscal había pedido para el mayor de ellos una condena de 18 años mientras que para su sobrino, a quien acusó de entregarle el arma homicida, la pena de 14 años de cárcel.
