La medida de fuerza por 24 horas que anunció para este lunes ATE Rosario, gremio que nuclea a agentes estatales tanto de la provincia, como del municipio, estará permeada por un reclamo puntual por la cesantía que recibió una inspectora en Higiene y Seguridad Laboral de la sede Rosario del Ministerio de Trabajo provincial.
La empleada, de nombre María José A., había denunciado a dos funcionarios de la cartera en la que se desempeñaba por violencia laboral y de género. Desde el gremio denunciaron públicamente que la mujer fue perseguida y difamada en lugar de recibir la contención necesaria.
"Dos organismos públicos intervinientes, Salud Laboral -que pertenece al Ministerio de Salud- y la Secretaría de Derechos Humanos, reconocieron que se trata de un caso de violencia laboral y de género e indicaron se la reintegre a su lugar de trabajo, ya que había sido trasladada como consecuencia de su denuncia", expresaron desde ATE en un comunicado.
Este lunes la damnificada hizo declaraciones públicas exponiendo lo que le tocó vivir. "Llegué a perder un embarazo por la violencia a la que fui sometida. Se me acusa de incompatibilidad por ser ingeniera civil e ingeniera en higiene y seguridad laboral, después de 11 años", manifestó en contacto con la emisora santafesina LT9.
El pedido para la reincorporación de María José A. se suma a los reclamos de ATE que este lunes realiza un cese de actividades para visibilizar la preocupación por el término de contratos de personal precarizado a nivel nacional, provincial y municipal. Desde el sindicato exigen que "los poderes ejecutivos, especialmente el provincial y municipal, den urgente respuesta a la continuidad laboral de miles de trabajadoras y trabajadores, se proyecta a las nuevas gestiones de Omar Perotti y Pablo Javkin".