El 41% de los trabajadores argentinos presenta síntomas ligados al agotamiento mental por el trabajo, también conocido como burnout. Rosario se encuentra en la mitad de tabla nacional, con una leve tendencia a la baja.
El agotamiento laboral es un síntoma diagnosticable vinculado a la sobrecarga de trabajo. Los individuos que padecen este tipo de trastorno no pueden desarrollar sus habilidades, ni afrontar el estrés normal de la vida ni trabajar de manera productiva. Además, se sienten menos involucrados y más distanciados del trabajo, según los especialistas.
Los números, recogidos por el Observatorio de Tendencias Sociales y Empresariales de la Universidad Siglo 21, reflejan que el 41% de los trabajadores indica que "siempre o casi siempre" le resulta difícil relajarse después del trabajo, mientras que el 32% muestra claros signos de desmotivación. A su vez, las mujeres son más propensas a tenerlo.
Los trabajadores rosarinos se encuentran a mitad de tabla de este ránking, disminuyendo su proporción de trabajadores con altos niveles de agotamiento 1,9% (pasando de10,9% a 9%).
El 20% se siente cada vez menos involucrado con su trabajo, el 21,4% duda que su desempeño contribuya en algo interesante y el 20,2% considera que ha perdido interés. Del resto de las ciudades estudiadas, Comodoro Rivadavia, Córdoba, Corrientes y Tucumán, aumentaron sus indicadores de burnout. Los mayores niveles de burnout se dieron en individuos de bajo nivel educativo y bajos ingresos.