La pareja de ancianos abandonada por su hijo ya tiene nuevo hogar

"Estamos esperando un poco de ayuda y si no, lo vamos a hacer de corazón", dijo la encargada de recibir a Hilda y Hugo.

La pareja de ancianos abandonada por su hijo ya tiene nuevo hogar
El matrimonio recibió ayuda de un cordobés pero se quedará en la ciudad\u002E (Facebook)

La desgarradora historia de la pareja de ancianos que fue abandonada por uno de sus hijos en Rosario finalmente sumó este lunes una de sus mejores páginas. Los jubilados fueron recibidos como húespedes del Hogar Español, una entidad sin fines de lucro donde se alojan casi 80 abuelos.

"Estamos esperando que Pami o alguna institución nos apoye un poco y se verá más adelante si recibimos algún ingreso. Si no, lo vamos a hacer de corazón", explicó Gabriela Alabern, la directora del establecimiento ubicado en la zona sudoeste.

La pareja pasó tres semanas en la casa de su otro hijo en la zona sur. (@de12a14)
La pareja pasó tres semanas en la casa de su otro hijo en la zona sur. (@de12a14)

La visita de un cordobés que quiso adoptarlos y hasta la invitación para viajar a Capilla del Monte fueron algunos de los gestos solidarios que recibió el matrimonio durante estas tres semanas difíciles en la casa de Raúl González, su otro hijo. Este mediodía ambos se despidieron y dejaron la vivienda de la zona sur para instalarse en Uriburu y Avellaneda.

La propuesta se concretó alrededor de las 11, cuando Hilda y Hugo llegaron al lugar. "¿Vamos a estar juntos?", fue lo primero que preguntó ella. En diálogo con Radio 2, Alabern detalló que el matrimonio comparte una habitación propia con baño privado y que, más allá de darles ropa nueva, no les falta nada material pero "sí mucho afecto".

Desde el Hogar Español expresaron que se encargaron de ir a buscar a los jubilados y que están "felices y contentos" después de acomodarse. Allí dispondrán de diferentes actividades semanales y se les garantizó la medicación necesaria. También podrán acceder a un menú con nutricionista, sesiones de kinesiología y rehabilitación.

El clavario de los González comenzó el miércoles 5 de junio, cuando su hijo Hugo los llevó a un bar en 27 de Febrero y Corrientes. Allí pidieron comida y él les dijo que volvería a buscarlos con sus cosas para mudarse. Con el correr de las horas creció la desesperación hasta que cayeron en la cuenta de que no volvería. Una vez que la policía intervino, se supo además que los habían desalojado del departamento que compartían los tres cerca de allí.

Pasadas varias semanas, nada se sabe del hombre que abandonó a sus padres allí. Su hermano Raúl se hizo cargo de alojarlos en su hogar, pero la situación se complicó rápidamente y los dejó al borde del hacinamiento. La vivienda de dos habitaciones no daba abasto para acomodarse con sus dos hijos e incluso pasó a dormir en el living con su esposa.

A pesar de los cientos de mensajes que recibió con ofertas de ayuda para encontrar una solución definitiva, el hijo de Hilda (89) y Hugo (92) tardó semanas en conseguir la ayuda necesaria para garantizar el bienestar de sus padres. En el medio hubo reuniones con representantes de Pami y la Municipalidad y este lunes al fin hallaron un lugar acorde al cuidado que ambos requieren.