La causa por la muerte de un ex convicto en el barrio A3-2 de Posadas, en un presunto caso de gatillo fácil, sigue sumando nuevos capítulos. Este jueves se conocieron nuevos testimonios de los policías involucrados en el operativo que terminó hace casi dos semanas con el asesinato de Arnaldo Amarilla.
Las primeras declaraciones dejaban muy complicado al sargento Emanuel Esteban Soley (32), el presunto autor de los disparos mortales. Según nuevas versiones brindadas ayer por otros uniformados que estuvieron presentes durante el hecho, es muy probable que el policía que disparó contra la víctima con una escopeta ithaca antidisturbios no haya estado enterado de que el arma estaba cargada con municiones de plomo y no de fogueo.
El jefe de guardia de la comisaría Décima, Miguel Lanús, brindó un extenso relato del momento en el que Soley tomó la escopeta y se marchó a la calle junto a la patrulla que integraba. "No estaba en condiciones de saber que había proyectiles letales en el arma", afirmó, según publicó Misiones Online.
Ante esta nueva información, la investigación pegó un nuevo giro. En diálogo con
,
el abogado de la familia de Amarilla sostuvo que solicitará llamar a indagatoria a todos los jefes de la Policía
, para saber con exactitud
cómo llegaron las balas de plomo a la escopeta ithaca que disparó
. A su vez, afirmó que pedirá
"la pena del art. 275 del Código Penal por falso testimonio a todos los policías que mienten en su declaración para salvar a un colega"
.
Los testigos explicaron que la comisaría provee tres cartuchos para la escopeta antidisturbios, uno de estruendo y dos con postas de goma. Por eso nadie se explica por qué la ithaca que accionó Soley tenía plomo. La pesquisa ahondará en si el sargento, que está preso junto al oficial Villalba, no estaba al tanto de la carga que tenía el arma