El Tribunal Penal Uno de Eldorado, presido por la jueza Lyda Gallardo e integrado por los jueces Ángel Atilio León y Eduardo Jourdan condenó a Martín Nicolás Olivera de 39 años a la pena de prisión perpetua por el asesinato de Juan Pablo Espíndola de 56 años cometido el 15 agosto de 2014.
Olivera fue declarado culpable del delito de "homicidio calificado por alevosía". Recibió la pena máxima de 25 años de prisión prevista por el Código Penal argentino. El fallo se adjudicó en función del pedido del fiscal Federico Rodríguez durante la jornada de alegatos.
El día del crimen, Espíndola había organizado un asado e invitó a varios amigos y conocidos, entre ellos Olivera, a su casa del barrio Bernín de Eldorado. Debido a una discusión entre Olivera y un hijo de Espíndola, el agresor en primera instancia decide retirarse pero luego vuelve armado con un machete y atacó a la víctima. La autopsia reveló que Juan Pablo Espíndola recibió 13 heridas cortantes producidas por el machete con el que cargaba el asesino. Olivera fue detenido al día siguiente. Según publicó El Territorio.