Los ataques a comercios, bajo la modalidad conocida como “robo piraña” que se sucedieron en los últimos días en varios de los principales centros urbanos del país encendieron las alarmas en el gobierno nacional porque se producen en medio de un clima de una acuciante crisis económica y de una impredecible definición electoral que determinará el futuro político de la Argentina. La situación no tardó en compararse con los saqueos que se produjeron durante la crisis de 2001 en la Argentina y en desatar nuevos cruces entre los actores políticos que incluyó a varios de los candidatos presidenciales.
Los episodios comenzaron a replicarse en Mendoza, en Córdoba y en otras provincias, donde ya hay decenas de detenidos por los atacar en grupo a distintos comercios. Y la situación no tardó en trasladarse al conurbano bonaerese: hubo intentos de robo en centros comerciales de las localidades de Moreno, de José C. Paz y de Escobar. En el caso de Moreno, los asaltantes destruyeron luego el comercio y lo prendieron fuego.
El ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, confirmó este miércoles que hay al menos 56 detenidos y apuntó: “No tengo dudas que ha sido organizado”. El funcionario bonaerense advirtió que “después de un bombardeo durante todo el día incitando a estos episodios de violencia, hay gente que tiene la estupidez de pensar que cuanto peor mejor”.
Ante la situación, el gobierno nacional anunció que se creará un comando especial. “Vamos a reunirnos hoy para crear este comando integrado por las cuatro fuerzas y vamos a invitar a la Policía de la Ciudad y a las policías provinciales”, precisó el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández.
La comparación con la crisis de 2001
En la administración de Alberto Fernández también salieron a diferenciar la situación con los saqueos que caracterizaron la debacle social y económica de 2001. “No ha habido saqueos y no ha habido acciones de otra característica que no sean esas, provocar una acción que llame la atención”, repitió el ministro Fernández.
En sintonía se manifestaron el jefe de Gabinete de la Nación, Agustín Rossi, y la portavoz presidencial Gabriela Cerruti, quien no tardó en desatar un nuevo escándalo político al responsabilizar al candidato presidencial por la Libertad Avanza, Javier Milei.
Rossi habló de “hechos delictivos” y descartó “una reacción social”. “Estuvimos al tanto el mismo viernes: pasó primero en Mendoza y luego en Río Cuarto y anoche (lunes) en la 1.11.14. En todos los casos se está trabajando desde el Ministerio de Seguridad de la Nación y provinciales. Hay detenidos por la autoridad policial y judicial, y muchos de los organizadores son ciudadanos que tenían antecedentes. No vemos en eso una reacción social sino hechos que merecen todo el peso de la ley”, dijo el jefe de ministros.
Cerruti reforzó esa hipótesis e incluso habló sobre la difusión en las redes sociales de mensajes, muchas veces con información falsa, que agravan el clima. “No hay tales saqueos: hay rumores y agitación a través de grupos de WhatsApp porque son profundamente antidemócraticos y quieren desestabilizar”, dijo.
Gobernadores e intendentes del conurbano bonaerense también denunciaron en las últimas horas la circulación de “falsas noticias” a través de las redes sociales, especialmente WhatsApp, en torno a presuntos saqueos, y advirtieron que esas acciones “tienen intenciones políticas” y “buscan alterar la paz entre los ciudadanos”.
Pero Cerruti pero luego apuntó contra el candidato a presidente por La Libertad Avanza, Javier Milei, y desató así una nueva polémica de tinte política. “Esta es una operación armada por la gente de Javier Milei”, denunció.
Es que justamente Milei habló de “saqueos” y los comparó con la crisis de 2001. “Las dos caras de las misma moneda. Es trágico volver a ver luego de 20 años las mismas imágenes de saqueos que veíamos en el 2001. Pobreza y saqueos son dos caras de la misma moneda”, escribió en sus redes sociales.
Tras la acusación de la Casa Rosada, en La Libertad Avanza redoblaron su posición y enviaron otro mensaje: “Las mismas imágenes que en el 2001. Los mismos responsables. Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre”.
Por su parte, la candidata a Presidente por Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, habló de “caos” para graficar la situación. “DEL CAOS SE SALE CON ORDEN. Casi 16 años de kirchnerismo transformaron a la Argentina en un país fuera de control y los resultados están a la vista. No podemos ceder ni un milímetro ante los delincuentes. Necesitamos ya la firmeza de la ley y el orden para salir de este infierno”, escribió en sus redes y prometió: “Conmigo, esto se acaba”.
