En enero, las transferencias de la Nación a las provincias en concepto de capital fue de apenas $ 2.581 millones, el nivel más bajo en términos reales desde 1993 a la fecha.
No es un dato irrelevante, ya que en ese ítem se imputan los fondos para obras de inversión.
Con base en los datos de ejecución presupuestaria “base caja” del sector público nacional no financiero de enero, el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), que encabeza el economista Nadin Argañaraz, dijo que, a pesos constantes de enero de este año (esto es, actualizando los datos históricos según la inflación, para que sean comparables), el nivel de las transferencias de capital a las provincias fue 98,5% inferior al promedio de los 31 meses de enero entre 1993 y el año pasado, que fue –a valores actuales– de $ 167 mil millones.
Si se considera la inversión pública total (esto es, sumando la encabezada de modo directo por Nación y las transferencias a provincias para la financiación de obras a cargo de los gobiernos provinciales en sus respectivos distritos), el nivel de inversión pública en enero de 2024 fue de $ 77.105 millones, 83% menos que el promedio del período ($ 444 mil millones).
El enero de mayor inversión pública por ambas vías (Nación y provincias, pero financiada por Nación) fue el de 2009, con $ 911 mil millones.
El enero de mayor inversión pública por ambas vías (Nación y provincias, pero financiada por Nación) fue el de 2009, con $ 911 mil millones.
En 2016, primer mes completo del gobierno de Mauricio Macri, estas erogaciones fueron de $ 828 mil millones (a precios actuales), y en enero de 2020, primer año de Alberto Fernández en el poder (antes de la pandemia), fueron de apenas $ 168 mil millones, 62% por debajo de la media del período 1993-2023.
Aún así, fue más del doble en relación con el nivel de enero de 2024, primer mes bajo el gobierno de Javier Milei.
El informe del Iaraf precisa que en 2023 las transferencias de capital a provincias representaron el 28% del gasto de capital total. Este a su vez, si se toma el período completo desde 1993 fue en enero pasado el tercero más bajo de la serie, solo superior a los gastos de enero de 2022 y de 2023, siempre con las cifras expresadas en términos reales.