Luego de que Paraná fuera clasificada, el pasado viernes, como zona de transmisión comunitaria la ciudad de Santa Fe decidió exigir el hisopado negativo a quienes viajan desde la capital provincial.
Ayer se pudo observar largas colas de vehículos que esperaban para poder cruzar hacia el lado santafesino, muchos de los cuales debieron regresar por no contar con el análisis solicitado. La polémica no tardó en instalarse, son muchas las personas que viajan a Santa Fe por cuestiones laborales y el costo del hisopado oscila entre los 6 mil y 8 mil pesos; sumado a que cuenta con una validez de 72hs. Con lo cual se trata de un gasto difícil de afrontar para quien necesita cruzar a la vecina ciudad.
La ministra de Gobierno de Entre Ríos, Rosario Romero, explicó en declaraciones a Radio Corazón que Santa Fe no debería solicitar el test negativo de coronavirus "debido a que la provincia sigue en etapa de distanciamiento". "Estaría no respetándose la letra del decreto del gobernador Perotti. El decreto dice a 'los que provengan de un lugar con aislamiento', no el distanciamiento. El distanciamiento es la situación en la que está Entre Ríos por el último decreto del Presidente de la Nación", indicó Romero.
En tal sentido, la ministra sugirió "sacar el permiso nacional o tener una actividad habilitada". "Desde el primer decreto presidencial hay actividades que están habilitadas y que no pueden ser cercenadas. Una es la de la prensa, otra es la de trabajadores esenciales, otra de los transportistas, las personas que tienen actividades autorizadas", detalló.
"Creo que nunca están de más las recomendaciones de cuidarse, pero el miedo a veces oficia en restricciones que no están del todo atadas a las normas", expresó finamente Romero.