La jueza Alejandra Mauricio dispuso un cambio en la calificación para los cinco imputados en la causa por la brutal golpiza que sufrió un joven a la salida de una fiesta hace poco más de dos meses en Chacras de Coria, por lo tanto todos recuperaron la libertad.
Cabe destacar que Moisés Pérez (30) fue atacado por una patota el 13 de setiembre tras una fiesta en un local ubicado en la zona de los caracoles de Chacras de Coria. Como consecuencia de la golpiza sufrió fractura de cráneo, de mandíbula y de pómulo, y hasta estuvo algunas horas en coma en el Hospital Central. Luego fue trasladado a la Clínica de Cuyo, en donde fue sometido a operaciones y se fue recuperando de las heridas.
Desde un primer momento se habló de una agresión de al menos 10 personas, luego apareció un video que terminó siendo muy importante en la causa para identificar a los presuntos autores del ataque.
A poco menos de una semana del hecho los primeros detenidos fueron Gonzalo Puebla (20), Malena Martínez (19) y su hermano Juan Manuel (28) y Alexis Romero (20), los cuatro imputados por la fiscal Claudia Ríos Ortiz por el delito de tentativa de homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas, que prevé de 10 a 15 años de cárcel.
A las pocas semanas se entregó otro joven, Michelle Rodríguez (19), quien recibió la misma calificación que el resto.
Las declaraciones de varios testigos terminaron señalando a los detenidos como los atacantes. La carátula del expediente quedó porque una persona aportó su versión y dijo que escuchó cuando algunos de los miembros de la patota dijeron “ahí viene”, haciendo referencia a que se acercaba Pérez; es decir, habrían hecho un acuerdo previo para castigarlo duramente.
La fiscal expuso todo esto hoy en la audiencia de prisión preventiva, en la que solicitó que los cinco sospechosos continuaran presos. Sin embargo la magistrada a cargo del caso, la jueza Mauricio no compartió tal calificación.
La jueza consideró que la acusación debe ser por lesiones graves y hurto agravado-a Pérez le sacaron el teléfono-, ya que no estaría probado el pacto que habrían realizado los jóvenes para abordarlo, hipótesis que sostienen los abogados defensores.
Los nuevos delitos que ahora les endilgan tiene penas de 1 a 6 años de prisión y son excarcelables, por lo cual les corresponde la libertad. Antes les fijó una caución de $40.000 a cada uno.
Por esta nueva medida, Puebla, los hermanos Martínez y Romero seguirán sujetos a proceso pero libres, y más favorecido aún resultó Rodríguez debido a que la jueza consideró que no hay elementos en su contra para vincularlo y que debe ser sobreseído. Él incluso había declarado y se había desligado por completo.
De esta manera los investigadores deberán seguir buscando implicados en el episodio. Cabe destacar que según fuentes tendrían identificado a un sexto sospechoso, quien por el momento se mantiene prófugo.