Este lunes el trabajador de Vendimia entregó a la Reina y Virreina de Godoy Cruz sus coronas restaurada. Una de ellas la donó en el año 2017 a la comuna, una joya de 1938.
Gabriel pertenece a una Embajadores de Vendimia, una personería jurídica creada formalmente hace 2 meses para acompañar a las representantes de Mendoza.
Los embajadores se forman por varios mendocinos especializados en la Fiesta Máxima, para ayudar a las chicas en sus labores pero sobre para seguir manteniendo la tradición.
“Nosotros lo que estamos tratando de hacer es ir por los departamentos ayudando a las chicas, dándole información de su departamento, protocolo y turismo”, comenta Rivero.
Para todas las personas que formar esta organización es importante destacar el respeto a la mujer, respeto a la cultura y a nuestras raíces.
Gabriel Rivero, tiene 48 años y trabaja hace mucho en esta fiesta que representa la tierra del Sol y del buen vino.
Se desarrolla en ceremonial y protocolo, es estilista y hace restauraciones a los elementos que usan las soberanas como la corona, el cetro y la capa.
“Yo lo viví desde muy abajo a la Vendimia. Gente muy humilde, que va enferma a cosechar, que llevan a sus hijos y que luego hacían el asado de fin de cosecha donde elegían a la Reina de la finca”, recuerda de su niñez Gabriel.
Para los Embajadores de Vendimia es muy importante la figura de la representante, muchos turistas vienen solo para verlas a ellas. También, el rol importante que cumplen con los proyectos sociales que realizan.
El rol de Gabriel con Nuri Donnantuoni
Gabriel es estilista de las Reinas desde hace varios años, se encargó de peinar a muchas mujeres, entre ellas Reina de la Vendimia 2005, Nuri Donnantuoni, quien falleció en un accidente de tránsito.
Ambos mendocinos apadrinaron a la Asociación de Sordos de la provincia, donde eligen también a una Reina y representante.
En este espacio Rivero ha donado dos coronas, cetros y capas para que las jóvenes que se presenten tengan elementos.
Actualmente, se busca que la Reina de la Asociación sea federada y reconocida en Mendoza. “Es la Reina de una comunidad”, agrega Gabriel. Este reconocimiento sería importante para fomentar la inclusión, pero aún no lo han logrado.