El 1 de abril se celebra el Día Nacional del Donante de Médula Ósea, es el 16º aniversario del Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH) del Incucai. Este registro es la entidad encargada de incorporar candidatos dispuestos a donar células para ser utilizadas en trasplante.
Cada año, a cientos de personas se les diagnostican enfermedades hematológicas, como leucemia, anemia aplástica, linfoma, mieloma, errores metabólicos o déficits inmunológicos. Estas enfermedades pueden ser tratadas con un trasplante de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH), conocido popularmente como trasplante de médula ósea.
Tres de cada cuatro pacientes no tienen donante compatible en su grupo familiar. Ser donante es un acto solidario y un compromiso a largo plazo. Es simple, sólo hay que acercarse a uno de los centros y donar una pequeña muestra de sangre.
En 2018 se realizaron 1.116 trasplantes de células progenitoras hematopoyéticas, 48 fueron pacientes mendocinos, 4 gracias al registro nacional de donantes, y 119 se realizaron con donantes no emparentados.
En 2019 ya hay trasplantados 13 pacientes, uno de ellos mendocino, y hay 17.171 donantes registrados en Mendoza.
En Mendoza se realizan dos colectas semanales de forma conjunta con municipios, universidades públicas y privadas y distintas empresas.
El Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH) fue creado en 2003 por la Ley 25.392, funciona en el Incucai (Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante) y ha permitido incrementar cada año la lista de argentinos que se suman a la red mundial de donantes voluntarios.
La donación de médula ósea se rige por el principio de solidaridad internacional. Toda persona inscripta en el Registro Argentino está dispuesta a donar CPH a cualquier persona del mundo que lo necesite.