Los proveedores de las meriendas escolares aseguran que el menú que implementaron este año, el aumento del dólar y la inflación afectaron considerablemente los costos de las viandas y que "van a pérdida".
Por la falta de respuesta del Ministerio de Salud y Desarrollo Social, varios de los empresarios han decidido reducir algunos alimentos a partir de junio.
En la actualidad, alrededor de 2.000 escuelas de toda la provincia reciben las 280.000 raciones diarias entre almuerzos y meriendas. Los menú son preparados y distribuidos por 220 proveedores de diferentes departamentos de la provincia.
A principios de este año, Desarrollo Social anunció un cambio en el menú escolar para que sea "más saludable". En un trabajo en conjunto con nutricionistas incorporaron más lácteos, carnes rojas, frutas y verduras a la alimentación de los chicos.
Si bien esta modificación fue en beneficio de los alumnos, los empresarios aseguran que los costos para preparar estas raciones han sufrido aumentos "desmedidos" por la inflación y el incremento del 46% en mercadería. Mencionaron que los panificados se incrementaron un 35%, las verduras y los huevos un 100%, la harina un 200%, los lácteos un 18% y las carnes rojas un 11%.
A eso le agregan también el impacto de la suba de los combustibles, un 30%. Este es un aspecto que se sumó de un año a otro, ya que en 2017 no se tuvo en cuenta la logística a la hora de elaborar el presupuesto.