Aunque lejos está la situación de encontrarse bajo control, la realidad parece evidenciar una mínima tregua en lo referido a la pandemia de Covid-19 en el continente americano. Algo similar, probablemente, a lo que se vivió en Europa con lo que fue el amesetamiento después de la primera ola de contagios (aunque por estos días atraviesa la segunda ya). En ese sentido, y mientras hay probabilidades de que el presidente Alberto Fernández anuncie el final del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio en algunas zonas del país, y mientras el gobernador de Mendoza pidió que se regrese al distanciamiento; esta mañana se oficializó el visto bueno de la Nación para el retorno de las clases presenciales en las universidades.
Sin embargo, el visto bueno definitivo deberán darlo las autoridades de cada provincia. En ese sentido, todas las universidades con sede en Mendoza (públicas y privadas) ya han elaborado y presentado sus propuestas de protocolo para regreso al Ejecutivo provincial. Y son las autoridades sanitarias y del comité epidemiológico provincial quienes deberán dar el visto bueno definitivo.
En la mayoría de las casas de estudio mendocinas aspiran a que al menos se pueda retomar la presencialidad para las mesas de exámenes finales del ciclo 2020, incluyendo aquellas que tendrán lugar durante el verano. En el caso de la UNCuyo, hace unas dos semanas se amplió la propuesta de protocolo y se puso a consideración del comité epidemiológico de la universidad; así como también del del Ministerio de Salud de la provincia de Mendoza.
Lo cierto es que las clases, como tales, recién retomarán la presencialidad en el ciclo 2021, y podrían ser en un formato mixto (que combine virtualidad con presencia en los edificios).
Escalonado y prioridades
La realidad es que no se trata de una decisión en bloque; ni siquiera dentro de las distintas universidades en particular. Según especificaron desde el Ministerio de Salud, cada casa de estudio tiene sus distintas carreras; y cada carrera sus formas de trabajo, herramientas y particularidades. De esta manera, aquellas en las que no se precise -por ejemplo- uso de aulas encerradas o con aglomeración de gente, y que permitan el distanciamiento de una forma más integral a la mecánica de la carrera; serán las primeras que podrán regresar.
En ese sentido, y más allá de que las universidades han formalizaron sus propuestas; todavía no se ha habilitado en la práctica a ninguna.
"Cuando podamos retomar la presencialidad, tenemos previsto darle prioridad a las mesas de exámenes presenciales que quedan de este año y a la recuperación de clases de laboratorio, para poder formalizar el cursado. Hace menos de un mes presentamos el protocolo al Gobierno de Mendoza, se hicieron algunas observaciones en las que trabajamos; y hace dos semanas lo volvimos a remitir, por lo que estamos a la espera de la respuesta", destacó a Los Andes el decano de la UTN regional Mendoza, José Balacco.
En esa universidad, 92% de los exámenes se tomaron este año en la modalidad virtual y más de 35 egresados obtuvieron su título en la misma virtualidad.
Los protocolos
Más allá de las particularidades de cada universidad y, a su vez, de cada carrera; hay ciertos patrones comunes que están presentes en todas las propuestas de protocolo. Demarcación de un circuito de circulación para que el ingreso y la salida no se den por el mismo lado, limpieza y desinfección permanente, limitación de bancos disponibles por cada curso (50% al menos); y todo complementado por alcohol en gel, señalética y el uso de tapabocas son algunos de los puntos en común. Fuente Los Andes